La compra-venta de inmuebles cerró el 2020 con un total de 18.764 operaciones en la Ciudad de Buenos Aires. Este dato representa una caída del 43,9 por ciento con respecto al año previo y el resultado más bajo desde 1998 hasta la fecha, cuando el Colegio de Escribanos porteño comenzó a realizar el relevamiento mensual.
"Cerramos un año 2019 que rompió todos los récord de caídas en las compraventas. Y aun así las 33 mil operaciones de 2019 quedaron mucho más arriba de las 18 mil totales de este año", señaló el presidente del Colegio de Escribanos porteño, Carlos Allende. La pandemia, que paralizó la actividad inmobiliaria durante largos meses, fue un factor central para explicar la caída. De hecho, en abril se realizaron apenas 7 operaciones. Junto al dólar caro, la caída del poder adquisitivo del salario, las restricciones para el acceso a las divisas y la incertidumbre económica, se conformó el combo que determinó el resultado de 2020.
En diciembre se concretaron 3065 operaciones, con una baja interanual del 6,1 por ciento. La actividad inmobiliaria había alcanzado en octubre 29 meses consecutivos en baja. Cortó la racha en noviembre, con una suba del 4,2 por ciento interanual, pero la merma reapareció en diciembre. El mes pasado, el monto involucrado en los actos de compra-venta fue de 22.932 millones de pesos, lo cual resultó un 12,2 por ciento mayor al del año anterior, asociado al dólar más alto. Así, el 2020 cerró con 18.764 operaciones de compraventa de inmuebles en CABA, un descenso de 43,9 por ciento con respecto a las 33.445 operaciones que se realizaron en 2019.
En cuanto a las operaciones con crédito hipotecario, en diciembre hubo 125 escrituras formalizadas con hipoteca bancaria, una baja interanual del 55,1 por ciento. En el total de 2020, la merma de las escrituras con crédito fue del 64,5 por ciento, con 1092 operaciones bajo esta modalidad. "Es una necesidad reconstruir estas herramientas de crédito en la economía", dijo Allende. El total anual de escrituras con hipoteca en la Ciudad en 2020 fue el más bajo desde 2009. El pico se dio de la mano de los créditos UVA en 2017, con 16.487 hipotecas.