Una entrevista del titular del Fondo Ruso de Inversión Directa (RDIF por las siglas en inglés), Kirill Dmtriev, permitió este martes aclarar la situación respecto de los envíos de la Sputnik V a la Argentina. El RDIF maneja la vacuna contra el coronavirus que creó el Instituyo Gamaleya, y Dmtriev le dijo a la cadena CNBC norteamericana que “puede haber alguna demora en nuestra producción porque estamos incrementando nuestras capacidades. Este es un proceso que nunca encaró el mundo, con la necesidad de cientos de millones de vacunas. Las expectativas tienen que ser realistas”. Dmtriev no habló sólo del atraso de la Sputnik V sino de todas las vacunas, incluyendo el escándalo en Europa por la demora de Pfizer de más de un mes en entregar las dosis. Pese a todo, el vuelo AR1062 fue a Moscú con la expectativa de traer algo más de las 220.000 dosis previstas y regresará mañana jueves al mediodía.
Durante los últimos días hubo medios que querían achacarle los atrasos de la llegada de la vacuna a “problemas logísticos argentinos”. En su diálogo con CNBC, Dmtriev explicó que “la producción de vacunas tiene muchos componentes y si hay problemas con uno, se demora todo”. O sea, que el ejecutivo reconoció que las demoras son de la producción rusa. Es algo normal y eso está ocurriendo con todas las vacunas: Pfizer argumentó que está ampliando su planta en Bélgica, pero en Europa son pocos los que creen en esa versión. También está atrasada la de Oxford-AstraZeneca, que recién empezará a proveer las dosis a mediados de febrero, pero el titular del laboratorio, Pascal Soriot, dijo ayer que “Europa pidió las vacunas tres meses después que el Reino Unido. Por eso ya hay vacunas en el Reino Unido y no hay en Europa”.
“Tenemos una de las mejores vacunas del mundo -afirmó Dmtriev-, tenemos una gran ciencia, pero tratan de meter la política en las vacunas”. El ejecutivo respondió así a los cuestionamientos, en muchísimos casos ideológicos, de la Sputnik V. En la Argentina, la oposición empezó por rechazar esa vacuna, luego argumentó que la segunda dosis ni siquiera existía, después pasó a decir que no era para mayores de 60, en el medio exigió la segunda dosis y finalmente pasó a denunciar que los envíos estaban atrasados por culpa del gobierno argentino. Lo objetivo es que mientras en casi todo el mundo hay tremendos dramas para la provisión de vacunas, el país tendría más de medio millón de vacunas en pocos días, algo que ni se soñaba hace meses. A esto se suma la inmensa presión de los países centrales que, en buena parte, tienen toques de queda todos los días.
Una de las pruebas más concretas de que los problemas son reales y afectan a la producción de todas las vacunas es que el presidente Vladimir Putin dijo de entrada que la fabricación de la Sputnik V en Rusia sería exclusivamente para los rusos. Por lo tanto, las vacunas para la Argentina provendrían de India o Corea del Sur. Lo cierto es que, por ahora, Aerolíneas va a buscar las dosis a Moscú porque está atrasada la producción en India, según las versiones, debido a que se está testeando la calidad. Y esto supone un desafío político, porque en Rusia hay reclamos debido a la lentitud en la provisión de vacunas, incluyendo en ciudades claves como San Petersburgo y en seis repúblicas que integran la Federación Rusa.
“Ya estamos proveyendo a 13 países, entre ellos Hungría y Emiratos Arabes Unidos, referentes en Europa y Medio Oriente”, dijo Dmitriev. El acuerdo con México es inminente y la Sputnik estaría aprobada en 24 países más en las próximas dos semanas.
El vuelo AR1062 traería 220.000 dosis 1. Sin embargo, cuando se cargue el Airbus recién se sabrá la cantidad total: hay expectativa de que se sumen dosis, porque los trabajos en el aeropuerto de Moscú continuaban en la noche del martes.