Marco Ruben volvió a Central. La mejor noticia que podían encontrar los hinchas de Central en la pretemporada estival se hizo realidad ayer por la tarde. El capitán regresó a Arroyo Seco y comenzó los entrenamientos junto con el plantel a las órdenes de Cristian González. Al cierre de esta edición, la dirigencia seguía aún negociando los términos del acuerdo para la contratación del arquero Jorge Broun. No hubo avances por los otros jugadores que reclama traer el entrenador.

Sin llamar la atención, aunque todos lo esperaban, ayer Ruben regresó a Central a diez meses de su último entrenamiento con los canayas en el country de Arroyo Seco. El ídolo dejó de entrenar en marzo de 2020, con la cuarentena decretada por la pandemia de coronavirus y no retornó con el inicio de la competencia, en octubre. Su regreso llega en momentos de pérdida de jerarquía del plantel y supone una renovación de confianza para Cristian González como entrenador. Puertas adentro se resolvió el problema personal que tenía con Emiliano Vecchio, situación que se originó muchos años atrás, cuando Vecchio, con 17 años, se sumó al plantel de Primera, donde ya se había consagrado Ruben como delantero.

El Kily espera ahora por la pronta incorporación de Broun. La negociación con el jugador se cerró el jueves, pero estaban pendientes de acuerdo los términos de su llegada con Gimnasia y Esgrima de La Plata, donde el arquero tiene contrato por seis meses más. El club platense exige los 250 mil dólares que por contrato está fijada la salida de Broun y al cierre de esta edición se discutían detalles del traspaso.

Otras negociaciones están en discusión aún y no hubo más avances para responder a los pedidos del entrenador, que espera por un defensor, un volante y un delantero más. El plantel realizará toda la pretemporada en Arroyo Seco. El miércoles la Asociación del Fútbol Argentino dará a conocer el fixture de la próxima temporada y el canaya conocerá su calendario.