El mayor impacto que los productos frescos tuvieron en el indicador de inflación de diciembre, parece calcarse en los números de enero. La asociación de consumidores Deuco denunció que, en el primer mes del año, las frutas y verduras volvieron a aumentar fuerte en los grandes supermercados. En este contexto, cada vez es mayor la diferencia entre las subas que se dan en frescos contra aquellos productos de “góndola”, incluso los que no están bajo congelamiento.
La entidad que lidera Pedro Busetti tomó el alza que tuvieron los 10 productos de la canasta frutihorícola que mide el INDEC, y la comparó con la evolución de esos precios en enero en grandes superficies comerciales. Considerando que en 2020 el rubro aumentó 75,6 por ciento, respecto a diciembre de 2019, bastante por encima de la inflación de 36,1 por ciento del año, el informe de la ONG mostró el siguiente escenario.
En enero del 2021, esos mismos 10 productos “no solo no bajaron, sino que se incrementaron significativamente”. Los aumentos, según DEUCO, oscilan entre un 12,2 por ciento (VEA) y un 69 por ciento (La Anónima) y el promedio del alza es del 35,8 por ciento.
Los precios se consultaron en las páginas web de los supermercados seleccionados entre los días 23 y 24 enero de 2021. Para definir el valor de los productos que se incorporaron al trabajo, se tomó siempre el menor precio ofrecido.
En cuanto a los productos, se ve que la canasta de 10 frutas y verduras pasó de 981,24 pesos en diciembre del 2020 a 1658,60 en enero del corriente. Algunos casos: en La Anónima, la manzana pasó de 185,56 a 249 pesos; mientras que el limón tuvo una suba de 133 pesos a 300 pesos. La lechuga, en tanto, pasó de poco más de 133 pesos a casi 396 pesos. Sólo hubo en la cadena de la familia Braun una baja poco más de 10 pesos en el zapallo.
En el caso de Coto, la manzana pasó de costar 185 pesos a 329 pesos si se considera el valor más bajo. Y la naranja pasó de 73,50 a 149 pesos. Allí hubo una baja en la papa, que pasó de 61 pesos a 47; y una baja fuerte en el zapallo, de casi 100 pesos a 49 pesos. En Walmart, también hubo una baja en el zapallo. Disco fue uno de los que menos alza reportó en relación a diciembre, casi 27 por ciento promedio en los 10 productos. El otro bajo fue VEA, del mismo grupo Cencosud, una línea de supermercados que se caracteriza por precios más bajos y apunta a sectores medios bajos y bajos.
Los números que mira el Gobierno
La situación de los productos frescos es una de las obsesiones del Gobierno. Luego del acuerdo por la carne, que empezó a funcionar este 1 de febrero, se busca realizar uno similar con frutas y verduras, y otro con aceites, que se asienta en un fideicomiso que se está armando con los exportadores de cereales en el marco de la mesa del maíz.
Lo que observan los ministerios técnicos es que hay un desacople palpable de los aumentos de frescos versus los productos de góndola, incluso contra aquellos que no están en Precios Máximos. En el Ejecutivo se habla de una inflación de frescos y otra de góndolas, que tiene los siguientes datos: considerando que el IPC de alimentos y bebidas subió en 2020 un poco más de 38 por ciento, la diferencia entre frescos y góndola es impactante.
La canasta de “góndola” subió 22,8 por ciento, contra un alza en el mismo período de 57,1 por ciento en la canasta de frescos. Visto por productos, el detalle es el siguiente: en “góndola”, Harinas y Derivados subió 26,6 por ciento; lácteos 20,2; aceites y manteca 24,1; Azúcar, dulces y golosinas 27,3; Infusiones 31,7; Gaseosas, aguas y jugos 18,8. Mientras que los productos más utilizados en pandemia, los de limpieza, subieron 16,4; mientras que los de Higiene Personal se incrementaron 24,4 por ciento. En el caso de la canasta de “frescos”, la carne subió 55,6 por ciento; las Frutas 64,4; y Hortalizas un 58 por ciento.