Un equipo de investigadores argentinos descubrieron el fósil de megaterio "más antiguo conocido", un ejemplar joven que vivió hace más de 3,5 millones de años, según informó este lunes el Museo de Ciencias Naturales de Miramar, ubicado en la provincia de Buenos Aires.

Descubierto a finales del siglo XVIII, el megaterio fue un enorme perezoso terrestre que habitó América del Sur hasta hace unos 10.000 años. Se extinguió principalmente por la acción de los cazadores humanos.


El animal podía llegar a medir hasta 5 metros de longitud y alcanzar las 6 toneladas de peso (comparable a los más grandes elefantes). Su hocico era estrecho y tenía una larga lengua con la que arrancaba las ramas vegetales de un árbol para alimentarse.

El Museo de Miramar señaló que el fósil hallado corresponde a un cráneo de megaterio de más de tres millones y medio de años, lo que sitúa a este animal en el Plioceno.

Dicho ejemplar fue encontrado en el municipio de San Eduardo del Mar, muy cerca de Miramar y a unos 450 kilómetros al sur de la capital argentina, gracias al trabajo "interdisciplinario" de investigadores del propio museo y de otras instituciones, como la Fundación Azara y la Universidad Nacional de Mar del Plata, entre otras.

El megaterio fue un "animal misterioso", debido a su extraña anatomía y gran tamaño, lo que durante años ha despertado curiosidad en el seno de la comunidad científica.

De hecho, algunos investigadores sostienen que podría haber sido un carnívoro que empleaba sus grandes garras para "apuñalar a sus presas" y que, al igual que el elefante o el rinoceronte, podría no haber tenido pelo, a diferencia de los perezosos actuales.

Los fósiles de megaterio se distribuyen por casi todo el territorio argentino, aunque "es la primera vez que se encuentran restos de tan alta antigüedad", sólo comparables a un hallazgo realizado anteriormente en Bolivia, según el Museo de Miramar.

"La existencia de un megaterio tan antiguo en las planicies pampeanas nos muestra que la historia de estos enormes perezosos aún es casi desconocida, y es posible que los megaterios hayan tenido una historia mucho más compleja de lo que se cree", concluyó la institución en su comunicado. El estudio fue publicado también en la revista científica Science Direct.