Los abogados de Newell’s en el fideicomiso que tiene a su cargo Fabián Bellizia renuncian al rol que vienen cumpliendo desde 2009. Ernesto Granados deja de ser el representante legal de la institución en el expediente, aunque por pedido explícito del vicepresidente Cristian D’Amico su dimisión no será inmediata y se producirá a partir de 1º de marzo. Newell’s está a pocos meses de pagar la totalidad de la deuda que heredó la institución del gobierno de Eduardo López, en un expediente que está en manos del juez Fabián Bellizia, quien en los últimos años debió tomar decisiones relevantes, como intervenir la tesorería del club y desplazar dirigentes para evitar que la entidad ingrese en un proceso de quiebra irreversible.

En los últimos años el juez Bellizia tomó de cerca la situación del expediente de Newell’s y logró evitar que el club agudice la crisis que se generó con la dirigencia que asumió bajo presidencia de Eduardo Bermúdez, en 2016. Para mantener al club de pie, uno de los apoyos que encontró el magistrado fue Ernesto Granados, abogado que representó a la institución en el expediente y tenía como objetivo “pagar la deuda”.

Newell’s está a solo una cuota de completar el saldo del rojo que dejó la gestión de López, objetivo al cual se llegó, entre otras cosas, controlando la gestión económica y administrativa de la actual dirigencia. Bellizia debió intervenir la tesorería y desplazar a sus miembros para evitar un cede de pago de las cuotas, lo que hubiese llevado al club a una situación económica e institucional terminal.

Pero el estudio de Granados se va a poco del final. El abogado leproso presentó su renuncia, aunque la misma se revió en algunos términos ante el pedido de D’Amico para que se quede. El vicepresidente segundo asume todas las tareas en el club, no delega y concentra poder, pero la parte jurídica lo deja descolocado. A su pedido, Granados elevará hoy una renuncia que se producirá a partir del 1º de marzo y no tendrá efectos inmediatos. Por entonces al club le quedarán dos meses para cumplir con el pago de la última cuota, valuada aproximadamente en 600 mil dólares. Granados ya había considerado en otras oportunidades dar un paso al costado, ante los temblores institucionales que sufrió la entidad  desde que asumió Bermúdez, pero se hace efectiva su dimisión a pocos días de que el club recupere la autonomía administrativa y contable. En el entorno del abogado relativizaron su salida: "Son muchos los motivos de su renuncia, pero el trabajo ya está hecho, quedan por dar solo dos pasos", explicaron.