Jóvenes egresados de las instituciones de cuidado estatal conformaron desde 2020 el grupo Salta Egresa, con el objetivo de trabajar sobre la igualdad de género y las distintas formas de violencia por razones de género que se visualizan en dichos establecimientos. La inquietud nació desde su propia experiencia al advertir que en general los tutores no tenían formación en esa temática.

Esto los llevó a capacitarse y poner en marcha distintos proyectos que abordasen el tema y así poder ser ellos mismos quienes brinden ese conocimiento en esas instituciones. Una de las primeras propuestas fue el proyecto "¿Y si hablamos de ESI?", que se presentó en la convocatoria realizada en septiembre del año pasado a través de la Mesa de Jóvenes de #EsConESI, desarrollada por las asociaciones Impacto Digital y FUSA AC e impulsado por la Iniciativa Spotlight en Argentina. 

Ángeles Juárez, de 21 años, egresada de una de las instituciones de cuidado e integrante de Salta Egresa, contó a Salta/12 que el proyecto sobre Educación Sexual Integral (ESl) surgió porque justamente vieron esa carencia durante su estadía en los establecimientos de cuidado. "Si bien había operadoras que conocían del tema por capacitaciones y cursos que pudieron tomar, no había mucho conocimiento", destacó. 

En ese sentido, ubicó a la formación en ESI como una prioridad, pues entendió que existe un contexto social y cultural que debe otorgarle "ese marco de importancia". "Decidimos hacer eso para los hogares porque es nuestro ambiente y queremos modificar eso", contó.

Durante la formación en ESI

Para Noel Britos, la jefa del Programa de Acompañamiento para el Egreso (PAE) de la Secretaría de Primera Infancia, Niñez y Familia del Ministerio de Desarrollo Social de Salta, el impulso de los jóvenes también radica en que "han sido protagonistas de la vulneración de derechos al vivirlo en carne propia". "Ellos pueden poner en palabras estas cuestiones de violencias y contribuir a la prevención entre adolescentes y jóvenes", indicó. 

Además, destacó que sean ellos mismos quienes accionen, capaciten y sean sensibilizadores sobre las dinámicas de violencias presentes en la juventud. "Nosotros como adultos acompañamos", agregó.

¿Y si hablamos de ESI? fue uno de los cuatros proyectos seleccionados a nivel nacional y se desarrolló junto a Jasmin Pérez y Roxana Pardo, quienes viven en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y forman parte de Guía Egreso, un programa de la asociación civil Doncel. El objetivo principal era desembarcar en los distintos dispositivos gubernamentales ubicados en AMBA, Salta y Santa Fe.

Para poder consumar el proyecto que consistía en capacitar a los operadores de los hogares, las tres jóvenes se formaron durante 6 semanas con especialistas de Córdoba, quienes las orientaron en entrevistas de campo, reuniones y armado del proyecto. "Tuvimos que hacer investigación y conocer bien los lugares donde los íbamos a hacer", señaló Juárez.

Folleto diseñado para la capacitación y difusión

El 10 de diciembre último presentaron la versión final del proyecto, que contó con la colaboración de la Agencia de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Secretaría de Derechos Humanos de la Provincia. “Así buscamos conversar, deconstruirnos, aprender respecto a, entre otros temas, el cuerpo, la sexualidad y el género. Y, por supuesto, en ese contexto hablar sobre cómo abordar la violencia física y psicológica”, manifestaron las jóvenes en la presentación. 

El proyecto estuvo dirigido a los equipos técnicos, directores de hogares, operadores del Polo Integral de la Mujer de Salta y directores provinciales de la juventud. Si bien, la idea era centrar la formación en las personas que ya trabajan en las instituciones de protección, Juárez explicó que se extendió la convocatoria porque buscan generar el efecto de réplica en todos los profesionales que trabajen con jóvenes y adolescentes. "Nuestra idea es seguir haciéndolo y que el material sea replicable", destacó. 

De esta manera, brindaron herramientas para que las personas puedan "hablar de ESI en sus ambientes de trabajo". "Entendimos que están predispuestas a recibir información, pero no sabían como después bajarlas a sus trabajos", desarrolló la salteña. Salta Egresa está conformada por 15 chicos y chicas mayores de 18 años que participan de distintas actividades.

Protagonismo juvenil 

Noel Britos contó que desde que se formó Salta Egresa se mantuvo un acompañamiento sostenido desde el programa. Actualmente cuenta con el apoyo del Programa de Acompañamiento para el Egreso (PAE) Salta, la Secretaría de Primera Infancia y la Secretaría de Fortalecimiento socio comunitario del Ministerio de Desarrollo Social. "Intentamos generar un acompañamiento en donde cada espacio juvenil tenga una participación activa para dar su opinión y punto de vista", señaló. 

Britos contó que desde 2019 se formaron los talleres denominados Servicios para la autonomía, en los que vienen desarrollando contenidos sobre ESI, violencia de género y nuevas masculinidades, ya que consideró que son temáticas que "deberían ser abordadas por la toda la población". Este espacio que nació desde la Secretaría de Primera Infancia, la asociación Doncel y la fundación Por Nuestros niños del barrio salteño La Loma, fue el puntapié inicial para la conformación de Salta Egresa. 

La funcionaria destacó la importancia que requiere trabajar estos temas en el ámbito de las instituciones estatales. En este sentido, se busca desnaturalizar situaciones que han vivido los propios jóvenes y a partir de ello, "crear algo nuevo" en donde "ellos sean los protagonistas con toda una perspectiva de género para poder hablarlo y cuestionarlo". 

Desde Salta Egresa junto al PAE presentaron el proyecto "Jovenes promotores y promotoras de derechos humanos para la prevención de violencia de género", en la convocatoria del proyecto Cerrando Brechas 2 del Equipo Latinoamericano de Justicia y Género. Hoy están a la espera de los resultados. 

De ser elegidos, se contempla que los mismos jóvenes sean los capacitadores brindándoles la posibilidad de una remuneración por su trabajo. Se estableció que se desarrolle en 4 dispositivos, 2 de mujeres y 2 de varones, proyectando un alcance a 60 adolescentes de entre 13 y 17 años. Britos dijo que en caso de no salir seleccionados, "lo vamos a hacer de la misma manera y como una contribución de Salta Egresa para los niños y adolescentes de los dispositivos de cuidado".