El Obrero de La Boca y Oviedo de Palermo, dos míticos bodegones de la gastronomía porteña, cerraron sus puertas. Ambos utilizaron las redes sociales para comunicar la noticia y despedirse de sus clientes.
“Llegó el momento del adiós, amigos. Ojalá que el destino nos vuelva a cruzar en nuevos proyectos”, escribieron desde el restaurante ubicado en la esquina de Guatemala y Humboldt, en el barrio de Palermo.
“Oviedo era mucho más que un bodegón, era el psicólogo de varios, el doctor de otros y el amigo de todos”, concluyó el mensaje de la empresa, sin perspectivas de reapertura ya que en el lugar construirán una torre.
En tanto, El Obrero informó que desde el primero de febrero cerró “por tiempo indeterminado” y que “en caso de una nueva reapertura será comunicado” a través de su cuenta de Instagram.
El bodegón, que nació en 1954 y fuera declarado de interés cultural por la Legislatura porteña, había logrado reabrir el 23 de noviembre pasado tras varios meses sin actividad debido a la pandemia de coronavirus y sus restricciones. Bono, Daniel Barenboim, Susan Sarandon y hasta el príncipe Alberto de Mónaco visitaron este mítico lugar.