Un joven estadounidense de 22 años que sufrió un grave accidente vial se convirtió recientemente en la primera persona del mundo en recibir un exitoso trasplante de cara y de ambas manos.
Joe DiMeo, de Nueva Jersey, sufrió quemaduras en el 80% de su cuerpo en julio de 2018, tras dormirse al volante mientras volvía a su casa luego de trabajar toda la noche. Su vehículo volcó y luego explotó.
Si bien otro conductor que pasaba por el lugar logró rescatarlo del coche en llamas, el accidente le costó la amputación de varios dedos, graves cicatrices en la cara y la pérdida de labios y párpados, lo que terminó afectando su visión y su capacidad de llevar una vida normal e independiente.
Pasó cuatro meses en la unidad de quemados, donde recibió numerosos injertos y transfusiones de sangre que le salvaron la vida. Además, tuvo que ser colocado en coma inducido durante dos meses y medio.
Transplante de cara y manos
La cirugía tuvo lugar el 12 de agosto de 2020, duró unas 23 horas e involucró un equipo de 96 personas dirigidas por el cirujano Eduardo Rodríguez, director del programa de trasplante de cara del Langone Health.
“Todos nosotros opinamos de manera unánime que Joe es el paciente perfecto. Es el paciente más motivado que he conocido”, señaló Rodríguez. Se trata del cuarto trasplante de cara realizado por Rodríguez y el primero de manos que se lleva a cabo bajo su dirección.
En la historia de la medicina se conocen sólo dos intentos de trasplantes de cara y manos simultáneos, pero ambos fracasaron. Uno de los pacientes murió a raíz de complicaciones causadas por una infección, mientras que el otro debió sufrir una amputación de las manos trasplantadas.
Según precisó Rodríguez, un test de anticuerpos reactivos indicó que DiMeo rechazaba un 94% de los donantes, por lo cual encontrar uno compatible implicó una búsqueda por todo el país equivalente a “encontrar una aguja en un pajar”.
Este donante compatible fue finalmente hallado en Delaware, a través del programa de donantes Regalo de Vida (Gift of Life). DiMeo recibió un trasplante de ambas manos hasta la mitad del antebrazo, incluidos los huesos radio y cúbito, tres nervios dominantes, seis venas sanguíneas que requirieron conexiones vasculares y 21 tendones.
La operación también consistió en un trasplante total de cara, que incluyó la frente, cejas, ambas orejas, nariz, párpados, labios y huesos del cráneo, pómulos, nariz y mentón.
“Estoy impaciente por regresar al trabajo”
Tras la exitosa operación de trasplante de cara y de ambas manos, DiMeo agradeció que ahora tiene “una segunda oportunidad en la vida”. “Siempre hay luz al final del túnel, nunca te des por vencido”, expresó el paciente este miércoles en una conferencia de prensa organizada por el centro médico Langone Health de la Universidad de Nueva York, que llevó a cabo esta pionera operación.
“Estoy impaciente por regresar al trabajo”, agregó DiMeo.