En el duelo de entrenadores argentinos, el Celta de Eduardo Coudet logró empatar 2-2 con el Atlético Madrid de Diego Simeone -algo que ningún equipo había conseguido en las últimas ocho jornadas de la Liga de España- y le restó al puntero del certamen dos puntos vitales. En el primer tiempo abrió la cuenta Santi Mina, el goleador uruguayo Luis Suárez lo dio vuelta con un tanto en cada etapa y cuando el Colchonero acariciaba los tres puntos, el ingresado Facundo Ferreyra decretó la agónica paridad. Ahora son ocho puntos los que separan al Aleti de Barcelona y Real Madrid, que este martes a las 17 juega de local el pendiente de la fecha 1 ante Getafe.
La presión alta ejercida por el ambicioso Celta durante en el primer tiempo en el Wanda Metropolitano, sumado al buen manejo de la pelota, la precisión y la contundencia que en otras ocasiones no tuvo, incomodó al puntero de la Liga de España, al que minimizó robándole la pelota.
Al minuto 12, la visita vencía con una apertura por derecha, un centro de primera de Mallo y el desmarque, a un metro del arquero Oblak, de Mina entre Felipe y Giménez. Ventaja y mérito de Celta, ganador del duelo que planteó entonces con la presión, y ciertas fallas en el Aleti, que tuvo como titular a Angel Correa.
El Celta era mejor, pero ni siquiera tal superioridad le bastó para irse al descanso al frente del marcador, porque el equipo del Cholo Simeone tiene una eficacia tremenda en ataque. Así, Llorente escapó por la banda y el centro picante encontró a Suárez. La revisión del VAR validó la ajustada posición del 9 y la cosa se puso 1-1.
El empate era lo mejor del Atlético Madrid. Y el empate fue lo peor para el Celta. Apenas de vuelta de los vestuarios, otra vez Suárez daba vuelta el trámite y con 16 anotaciones se erigía como artillero del torneo español, tres por encima de Lionel Messi, su ex socio en Barcelona.
Entonces los cambios de Chacho Coudet fueron fructíferos y así el empate fue protagonizado por dos argentinos: Augusto Solari escapó a la marca de un rival y metió un centro venenoso que encontró mal parada a la zaga colchonera, algo que Ferreyra aprovechó para decretar la igualdad final y arrebatarle dos puntos al puntero.