"Yo hoy puedo hablar, Marisol no pudo". La frase fue parte de un testimonio esperado en el juicio por el femicidio de Marisol Giraldi, ya que para la familia y la querella dio cuenta de los antecedentes violentos de Yamil López, el acusado de prenderla fuego, en 2018. Ana contó a través de una pantalla, por Zoom, los hechos de violencia que padeció más de diez años antes del caso de Marisol, cuando fue novia del acusado. La muchacha tenía 16 años el día que iba camino a la escuela y Yamil --con quien la relación había terminado-- se le paró enfrente, en una bicicleta bordó y le dijo que subiera para que la alcance. En un momento, cuando ambos estaban sentados, extrajo un arma de la mochila y le disparó en la vagina. En la misma jornada del juicio oral, que comenzó al semana pasada, se leyó una carta en la que Marisol le decía a Yamil que no quería continuar con la relación.
El testimonio de Ana fue considerado como "muy importante" en el marco del debate oral y público en el que la Fiscalía y la querella del Centro de Asistencia Judicial pidieron pena de prisión perpetua para López. La muchacha relató que el ataque ocurrió luego de episodios de violencia durante la relación adolescente, que ella decidió terminar. Incluso, relató haber recibido golpes por los que llegó a perder un embarazo, tres meses después de iniciada la relación. Cuando fue baleada la joven vivió un calvario durante los meses de recuperación y actualmente vive fuera de la provincia. En aquel momento, la causa quedó en la Justicia de Menores --ya que López también era un adolescente--, caratulada como lesiones graves. En un primer momento fue declarado responsable y posteriormente condenado a dos años de ejecución condicional.
La testigo relató ayer delante del tribunal de juicio que le causó escozor saber que el ataque a Marisol fue cometido el mismo día de lo que le sucedió a ella: un 18 de octubre. Incluso, se sorprendió con el dato de que también fue una relación de alrededor de seis meses. "Este testimonio fue importante para que vean que es un mentiroso, que le echa la culpa a los demás pero nunca sintió culpa ni remordimiento, como dijeron quienes intervinieron en la causa de Menores", dijo Florencia, cuñada de Marisol, que presenció la audiencia de ayer.
En tanto, en la misma jornada se leyeron tres cartas que fueron encontradas en la billetera de López, cuando fue detenido. Dos de ellas, en las que Marisol se declaraba enamorada del acusado, estaban rotas y sin fecha. Mientras que en una tercera, que tenía la fecha del día previo a la noche del femicidio, ella decía "que lo iba a dejar, que no aguantaba más, que quería seguir adelante por sus hijos".
Al final de la jornada, la querellante Juliana Tagliatti señaló que restan algunas declaraciones, entre ellas la de bomberos que intervinieron en el caso. En tanto, Oscar, el padre de la víctima, se esperanzó con que el agresor sea condenado, aunque aseguró: "Nadie me va a devolver a mi hija".