Un hombre de 34 años y una mujer de 33, que iban en auto fueron asesinados a tiros ayer pasadas las 15 a pocos metros de la intersección de las calles Vera Mujica y Rueda. El auto, un Peugeot 306 color verde, quedó con su motor encendido y con los dos cuerpos dentro, fruto de una docena de disparos calibre nueve milímetros que le propinara con un arma de puño al menos un hombre que se acercó al vehículo. El doble crimen elevó la cifra a 18 muertes violentas en lo que va de este 2021. El tráfico de estupefacientes era una las hipótesis de los pesquisas. El hombre trabajaba de remisero y el ataque pudo estar dirigido a la mujer.
Según informaron fuentes de fiscalía "al menos una persona, no identificada al momento, intercepta el vehículo en que se trasladaban las víctimas, extrae un arma de fuego y efectúa disparos hacia el automóvil, produciéndole el fallecimiento al conductor del mismo y a la acompañante en el lugar".
Una de las hipotesis que se barajaba ayer es que el conductor del 306 verde oscuro se disponía a ingresar a un lavadero de autos, de los tantos que hay en esa zona del barrio San Francisquito. Fue en ese momento, luego de que el auto doblara por Rueda e hiciera unos metros, que un hombre apareció y atacó a balazos contra la pareja dándole muerte casi en el acto. “Los estaban esperando”, describió una vecina.
En tanto algunos vecinos del lugar se quejaron de la demora de la ambulancia ya que fueron testigos de la agonía del conductor, un hombre calvo que se desvaneció en el asiento: al menos dos balazos eran visibles en la puerta.
Su acompañante, en tanto, abrió la puerta del coche pero no alcanzó a escapar. Pronto, la escena quedó vallada hasta entrada la noche. Los policías recolectaron 7 vainas servidas calibre 9 milímetros.
Cerca de las 18, allegados a las víctimas llegaron al lugar y los vecinos presenciaron escenas de dolor y desolación. Poco después se conocieron las identidades de las víctimas: Natalia Nancy Salinas, de 33 años, y Diego Alberto Maldonado de 34. Ambos eran oriundos de barrio Tablada, de acuerdo a lo informado por voceros de la Fiscalía.
Fuentes policiales indicaron que el médico forense en un examen preliminar dio cuenta de que Maldonado presentaba 11 orificios de bala mientras que la mujer tenía 7.
El caso quedó a cargo de la fiscal de Homicidios Dolosos Georgina Pairola, que delegó las medidas de investigación a personal del Gabinete de Criminalística y de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) para el relevamiento de la escena del hecho, recolección de material balístico, toma de testimonios a vecinos de la zona.
Se secuestraron 7 vainas servidas calibre 9mm en el lugar enviadas a peritar. La División de homicidios de AIC realiza medidas investigativas dictadas por el fiscal interviniente tendientes a dilucidar la mecánica del hecho, motivación e identificación del agresor.
Fuentes de la investigación aseguraron a este diario que "el hombre no tiene antecedentes mientras se esperaban los datos sobre la mujer, quien podría tenerlos".
Según los pesquisas, al cierre de esta edición la version más concreta es que Maldonado podria ser un remisero que la estaba llevando a Salinas de regreso a su casa ubicada en la zona. A esta hora, lo que se investiga es si se conocían o no. Obviamente el hombre podría tener una actividad de remis trucho y estaba ganándose unos pesos simplemente" confió uno los detectives.
En cuanto a dilucidar el motivo del ataque los pesquisas sospechaban ayer que la mujer podria haber sido el objetivo real, auqnue los rastros en el cuerpo de las victimas lo contradecían: Salinas tenía siete impactos en su cuerpo mientras el hombre tenía rastros de más de 10 impactos, aunque se sospechaba que alguno de ellos podría ser de salida y entrada al cuerpo. Lo que quedó claro es que el calibre del arma es de nueve milímetros, un sello ineludible de ataque sicario narco.