El Banco Central compró 235 millones de dólares en el mercado de cambios en la semana. Este viernes no tuvo intervenciones pero en las jornadas anteriores registró compras de más de 100 millones de dólares por día. La autoridad monetaria acumuló en lo que va de febrero compras por más de 400 millones de dólares y aún quedan 8 jornadas hábiles.

De esta forma quedaron opacados los pronósticos de consultores del mercado que aseguraban que durante febrero iban a volver las presiones cambiarias y las dificultades del Banco Central para continuar acumulando reservas internacionales. El equipo económico consolidó una tendencia de compra de divisas en los últimos tres meses cuando en diciembre la autoridad monetaria adquirió más de 600 millones de dólares por primera vez desde mitad de año.

Parte de este resultado se explica por la moderación de la brecha cambiara y la relativa estabilidad de los últimos meses. En octubre la diferencia entre el dólar oficial y el contado con liquidación había superado el 100 por ciento. Actualmente se ubica por debajo del 65 por ciento y muestra una volatilidad reducida.

Las expectativas de devaluación del mercado bajaron fuertemente en las últimas semanas y luego de las declaraciones del ministro Guzmán acerca de la pauta de ajuste del tipo de cambio oficial del 25 por ciento para 2021 continuaron bajando los precios del dólar futuro.

El combo de controles cambiarios, colocación de deuda en moneda local, regulaciones a las agencias de bolsa, entre otros fueron claves para consolidar la estabilidad cambiaria. El precio de los dólares financieros (contado con liquidación y tipo de cambio paralelo) se mantiene debajo del dólar ahorro usado como referencia por el equipo económico.

Este viernes el contado con liquidación terminó en 151,61 pesos al retroceder 0,4 por ciento en la jornada. El dólar paralelo se ubicó en 150 pesos con un alza de un peso respecto del jueves pero una baja de dos pesos en los últimos tres días. Por su parte el dólar ahorro (con el impuesto País y el recargo a cuenta de ganancias) se ubicó en 155 pesos.

Por el lado de las acciones hubo un retroceso del 0,4 por ciento en el índice Merval con empresas que perdieron hasta 3 por ciento. En la bolsa de Nueva York algunas compañías dedicadas al negocio de la energía como Pampa rebotaron casi 6 por ciento mientras que las acciones de los bancos perdieron hasta el 4 por ciento.

Los bonos en moneda extranjera continúan marcando retrocesos. Los de corto plazo como el Bonar 2030 bajo legislación local perdieron 1,5 por ciento. El riesgo país se ubicó en 1461 puntos con una leve disminución de 1 punto.

En el mercado especulan que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional si se concreta en el segundo trimestre de este año será un catalizador de las compras de estos títulos públicos. El rendimiento de los bonos argentinos se ubica muy por encima del retorno de los bonos regionales (17 por ciento contra 5 por ciento). Esto genera una oportunidad de arbitraje.

Por el lado de los bonos en moneda local se destacó la suba de los activos atados a la inflación. Por ejemplo el TX26 marcó un incremento del 2,5 por ciento y en lo que va del mes acumula una suba del 6 por ciento. La inflación reportada por el Indec del 4 por ciento sumada a una cifra idéntica de diciembre potencia las compras de estos bonos.