Luego de una semana de plenarios con las y los delegados docentes, UTE-Ctera resolvió comenzar las clases presenciales el miércoles próximo. Sin embargo, advierten que harán distintas acciones y que la posibilidad del paro no se descarta del todo. “No vamos a permitir nada que contradiga el protocolo, vamos a fiscalizar que se cumpla”, señaló a Página/12 la secretaria gremial, Alejandra Bonato. Por su parte, Ademys convocó a un paro por 72 horas coincidente con el inicio del ciclo lectivo.
Luego de un debate con participación de más de mil docentes de todas las áreas y niveles, y de una reunión de la comisión directiva del sindicato --en la que se ponderaron los informes “sobre los reclamos, pedidos, preocupaciones y postura de cada área”-- UTE-Ctera decidió por una “amplísima mayoría” el plan de acción frente el comienzo presencial del Ciclo Lectivo 2021. “Vamos a estar el miécoles en las escuelas, haremos acciones en distintos puntos de la ciudad y relevaremos las condiciones en cada escuela”, explicaron desde el sindicato.
Las medidas consisten en realizar el mismo miércoles 17 una jornada de “organización, lucha y difusión junto a la comunidad educativa en defensa de la Salud y la Educación”, crear una mesa de diálogo entre cooperadoreas, estudiantes, docentes y auxiliares educativos para realizar en colaboración con especialistas una Verificación Técnica Escolar (VTE), y formar un comité de seguimiento por Comuna para evaluar la situación epidemiológica y la infraestructura edilicia.
“El protocolo existe y vamos a fiscalizar que se cumpla”, sostuvo Alejandra Bonato en diálogo con Página/12. “Vamos a elaborar actas en aquellos casos que no se cumpla, en que no haya elementos de protección o no estén garantizadas las condiciones de salud. Y haremos un registro fotográfico y audiovisual para juntar evidencia y que esto no quede en la palabra de los docentes o en la palabra de los sindicatos”, agregó.
Otra medida decidida por unanimidad en el sindicato es la de “responsabilizar judicialmente a Larreta, Quirós y Acuña por sus decisiones gubernamentales y los daños personales y sanitarios que pudieran ocasionar en la comunidad educativa”, mientras continúan reclamando la excepcionalidad de la presencialidad para docentes mayores de 60 años, a cargo de hijos/as menores de 14 años y/o convivientes de personas en grupos de riesgo, entre otros temas como vacantes para todas y todos los estudiantes, aumento del presupuesto educativo y realización presencial del los actos públicos.
Cerca del 97 por ciento de las y los delegados rechazaron hacer una huelga. “¿Cuál es la idea de un paro? Un dirigente no puede llevar al trabajador a una situación en la que se le descontarán los días y con un inicio de clases sin mesa salarial”, expresó Bonato.
Paralelamente, el jueves próximo UTE-Ctera reclamará junto con los otros cuatro sindicatos docentes con representación nacional un aumento salarial que supere el 29 por ciento para equiparar el proceso inflacionario, en el marco de la convocatoria a la Paritaria Federal Educativa 2021 lanzada por el ministro de Educación Nicolás Trotta.
Informe: Sofía Moure