El caso de Ursula Bahillo conmocionó a la sociedad argentina por distintos motivos, entre ellos el hecho de que su femicida, Matías Martínez, sea un oficial de la Policía Bonaerense. A pocos días del crimen en Rojas, la conmoción se intensifica con la búsqueda, en La Falda, de Ivana Módica, quien se encuentra desaparecida desde el jueves. El principal sospechoso es su pareja, Javier Galván, piloto de la fuerza aérea de Córdoba. En Formosa, Mirna Elizabeth Palma, una docente de 44 años, fue asesinada el lunes por un policía retirado que, tras el crimen, se suicidó. Este martes hubo además un doble femicidio en Santiago del Estero.
"Uno de cada cinco femicidios en nuestro país es cometido por miembros de fuerzas de seguridad", advirtió la semana pasada el movimiento Ni Una Menos. Tras lo ocurrido con Ursula convocó a una marcha para este miércoles a las 17 "contra la justicia patriarcal y la represión policial" en las puertas de los Tribunales porteños y otros puntos del país. De acuerdo a datos del observatorio de Mujeres de la Matria Latinoamericana (MuMaLá), el 12 por ciento de los femicidios de este año sucedió en manos de personal de las fuerzas de seguridad.
Analía Kelly, coordinadora de MuMaLá en la provincia de Buenos Aires, se anticipa al escenario del miércoles: "Va a ser una marcha grande, contundente, con extensión federal. A días del asesinato de Ursula se conocen nuevos hechos que necesitan un abordaje pronto. Una vez más volvemos a alzar nuestras voces y no nos vamos a cansar hasta que efectivamente no haya un freno a la violencia machista".
La búsqueda de Ivana
La búsqueda de Ivana Módica, quien se encuentra desaparecida desde la noche del jueves en la localidad cordobesa de La Falda, se enfocó el martes por la mañana en una zona del dique de esa ciudad del Valle de Punilla y las Siete Cascadas. Participaban más de 70 efectivos. Intervenían personal policial, de Defensa Civil y bomberos, aparte de buzos tácticos. Se emplearon drones y kayacs, y perros. Una cámara de seguridad había registrado que un vehículo similar al de Galván había pasado varias veces hacia el dique entre las 22 del jueves y la 1 del viernes.
Después, la investigación se trasladó a un sector específico camino hacia Pampa de Olaen. El abogado de la familia, José Dantona, informó a este diario que ese lugar iba a ser parte del operativo porque es cercano al dique. "Pero además hubo gente del lugar que vio tierra que podía estar movida", contó.
Galván está detenido desde el lunes por falso testimonio agravado y resistencia a la autoridad. "Técnicamente nadie descarta un accidente o la peor hipótesis de femicidio -dijo Dantona-. La familia siempre tuvo una visión de esta persona. Una opinión, el conocimiento de la relación que mantenían con Ivana. Era una persona violenta. El lunes obviamente estas posiciones, estos pensamientos se acrecentaron." El abogado opinó también que "se está haciendo humanamente todo lo posible en la búsqueda" de la mujer. "En cuanto a la detención uno no puede estar conforme, porque él no está imputado, acusado, sospechado de femicidio, sino por falso testimonio. Nosotros ni siquiera íbamos para ese lado. La familia tenía un concepto de él, pero no estaba esa previsión, nos sorprendió", agregó.
Los investigadores aseguraron que se aguarda para las próximas horas la indagatoria a Galván, apresado a pedido de la fiscal de Cosquín, Jorgelina Gómez. Hubo contradicciones en la declaración testimonial. La detención y la acusación surgieron a partir de esas inconsistencias y por violación de la orden de distanciamiento que se le impuso meses atrás. En octubre de 2020, Módica lo denunció por violencia de género. Fue antes de que vivieran juntos por primera vez.
"Era una persona violenta incluso antes de esta denuncia; está acreditado con testimonios de la familia y la psicóloga de Ivana, que forman parte del expediente. Era una relación donde él pedía permanentemente otra oportunidad", detalló Dantona. Galván había denunciado a Módica previamente "por un hecho menor". "Muchas veces se hace una denuncia para empatar a otra. A ella le hizo click la cabeza y lo denunció. El terminó llorando, diciendo que iba a cambiar, y eso redundó en una reconciliación con condiciones. Convivían, aunque dormían en cuartos separados. En esa lógica termina la situación en que estamos ahora", relató.
Este martes por la mañana la madre de la mujer aseguró a Cadena 3 que su hija "es una persona muy fuerte" y que "si no aparece es porque está golpeada en la cabeza, porque si tuviera un golpe en el cuerpo, saldría adelante". También dijo que jamás salía sin comunicarse y que no sabe qué puede haber ocurrido: "Son todas especulaciones". "No es de quedarse jamás. Es fuerte de mente, espíritu y cuerpo. Lo que más nos preocupa es que no aparezca", expresó. Según los investigadores, Ivana se comunicó por última vez por celular con su hija Nicole el jueves cerca de la medianoche.
Galván presta servicios en la Fábrica Argentina de Aviones (Fadea). Según su perfil en la red Linkedin es piloto de ensayos y tiene 3.090 horas de vuelo. "No es alguien que recién empieza, es una persona de muy alto rango, tiene una alta preparación física y psicológica. Además, estaba en los comités de operativos de emergencia por el tema de la Covid", describió Dantona. El piloto fue quien realizó la denuncia por la desaparición de su pareja, el viernes, argumentando que se había ido a trabajar a las 6.30 y que cuando regresó por la tarde ella no estaba en la casa. Dijo que la mujer había salido a caminar en la zona del cerro La Banderita. Luego, cámaras de seguridad detectaron su auto en la zona del complejo Siete Cascadas y el Dique a la 1 del viernes, cuando él había dicho que en ese horario el vehículo estaba en el garage de su vivienda. Por esto, la fiscal solicitó su detención y la búsqueda de Ivana cambió de lugar. El domingo hubo una marcha para reclamar por su aparición con vida.
El femicidio de Mirna
Mirna Elizabeth Palma. Así se llamaba la docente formoseña de 44 años asesinada por su expareja de un balazo. El era policía retirado, fue identificado como Carlos Medina (59), y tras el femicidio se suicidó.
El crimen ocurrió cerca de las 20.30 del lunes en una vivienda de la calle Juan Bautista Alberdi, en el departamento de Patiño, localidad Estanislao del Campo, a 235 kilómetros de la capital provincial. Fuentes policiales informaron que la investigación comenzó cuando vecinos llamaron al 911 luego de haber escuchado detonaciones de arma de fuego.
Al llegar al lugar, los efectivos encontraron al hombre muerto sobre la vereda de la casa con un disparo en la sien. Al costado de su cuerpo había un arma de fuego. Dentro de la vivienda estaba la víctima, ya fallecida, con un disparo en el rostro. Los investigadores determinaron, en base al relato de testigos, que el hombre mató a su expareja y después se suicidó. En principio, no confirmaron que haya habido denuncias previas por amenazas o violencia de género.
Doble femicidio en Santiago del Estero
Por otro lado, un hombre identificado como Rino Garnica asesinó a puñaladas este martes a su expareja, Silvia Rojas, y a su excuñada, Silvana Natalia, frente a los hijos de 13 y seis años de ambas. Fue en la localidad de Lote 40, en el sur de Santiago del Estero. Garnica se entregó a la policía y quedó detenido.
De acuerdo a las primeras investigaciones a cargo de la coordinadora de fiscales, María Emilia Ganem, el hombre habría llegado al lugar en donde estaba Silvia “llevando helado para compartir con su hijo”, momento en que se desató el doble femicidio. Los efectivos policiales y los bomberos hallaron a ambas mujeres tendidas en el suelo. Fallecieron de camino al hospital. Hasta el momento se conoció que Silvia se presentó en los primeros días de este mes en la dependencia policial de Los Juríes para hacer una exposición acerca de que se retiraba de su hogar ya que tenía problemas de pareja con Garnica.
"Estamos hartas. Sabíamos que ninguna de nuestras luchas finalizaba el 30 de diciembre", dice Yanina Waldhorn, integrante de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal Seguro y Gratuito, en la víspera de que cientos de mujeres vuelvan a tomar las calles.
"Dolorosamente común"
"¿Y de la Policía quién nos cuida?": esta es la leyenda que aparece en el flyer de la convocatoria de Ni Una Menos para este miércoles. En el Facebook del colectivo, se lee: "En el país entero surge la necesidad de convocarse, de denunciar. Ahora mismo, otras tiemblan de miedo porque ven replicada su historia en la historia de Ursula. Ese dolor, esa impotencia, esta rabia y este duelo se están organizando", concluye el texto, escrito antes de la desaparición de Ivana, del femicidio de Mirna, del doble femicidio de Santiago. Es que, como se ve, la historia de Ursula "no es extraordinaria", sino "dolorosamente común".
"El eje está puesto en Ursula y en todes, pero fundamentalmente también en que el Estado es responsable. Buscamos resaltar la importancia del Ministerio de Seguridad, para que se ponga a trabajar sobre este tema, muchas vamos a llevar la consigna en provincia de 'Fuera Berni' y también 'basta de impunidad policial y complicidad", cuenta Kelly. "Cuando los violentos forman parte de alguno de los organismos o instituciones de poder es más difícil y controversial la cuestión, porque no solamente juega el machismo anquilosado en nuestra sociedad, sino también los intereses de poder, puntuales, en quienes ocupan hoy determinados cargos jerárquicos, en su mayoría varones."
Por su parte, Waldhorn resalta la necesidad de "una reforma judicial". Y manifiesta: "En el caso de Ursula todo funcionó mal. Se ponen en juego los dispositivos de los gobiernos nacional, provincial, municipal, pero también la Justicia. Mañana se va a salir en todas las ciudades. Empezó siendo una convocatoria en CABA y otros puntos, pero hoy vimos hasta flyers de Madrid. Venimos de la conquista del aborto legal y nos sentimos fuertes. Ursula nos pidió ayuda de todas formas, intentó hacer todo y no pudo salir. Hace seis años venimos diciendo Ni Una Menos. El grito sigue intacto".
Femicidios de uniforme
El observatorio Ahora Que Sí Nos Ven registró en 2021 -hasta el 9 de febrero- 38 femicidios, cuatro de ellos perpetrados por agresores pertenecientes a fuerzas de seguridad (dos militares, dos policías). Desde 2018 hasta la actualidad, 214 femicidas pertenecen o han pertenecido a alguna fuerza de acuerdo al monitoreo de La Casa del Encuentro. El Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) posee números que abarcan el período 2010-2020. Solamente en AMBA, en una década, al menos 48 mujeres fueron asesinadas por sus parejas o exparejas policías. La Correpi acuñó la expresión "femicidios de uniforme", “la primera causa de muerte de mujeres a manos del aparato represivo estatal”. Desde 1992 hasta la fecha se registran 392 femicidios de uniforme sobre un total de 674 víctimas mujeres de la represión estatal.
Un reciente artículo de Perycia, construido mediante un pedido de Acceso a la Información Pública al Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, revela un dato escalofriante: la Bonaerense tiene 6 mil policías activos denunciados por violencia machista. En los últimos siete años, uno de cada nueve policías bonaerenses fue acusado de violencia de género. El porcentaje de sanciones expulsivas es escasa: más del 80 por ciento de los investigados por Asuntos Internos siguen actualmente en funciones.