Omar Moreno Palacios, uno de los máximos referentes de la canción folklórica surera, murió anoche a los 82 años, tras permanecer varios meses internado por una encefalitis. Su hija Rocío dio la noticia a través de un mensaje en las redes sociales.
"No puedo elegir bien las palabras en este momento. Hablo, escribo y todavía no lo creo", escribió la hija del cantante. Detalló que la muerte se produjo cerca de la medianoche e invitó a participar del velorio, que se desarrolló hasta las 15 en Temperley, donde vivía el artista.
En tal sentido, remarcó que "él no quería nada. Ni despidos, ni llantos, ni que lo estén mirando, solo quería estar escuchando milongas" y añadió que "todo aquel que quiera y pueda pasar a lo que quiera, despedirse, llorar, hablar, pasar o tocarse un tema, será bienvenido".
Moreno Palacios fue autor de canciones como "Sencillito y de alpargatas", aclamada en festivales europeos y considerada una especie de himno del folclore característico del sur bonaerense. En su estilo, se ubicó como uno de los referentes indiscutidos junto a José Larralde y Argentino Luna. Además, divulgó la música del sur en ciclos radiales como "La Posta", que en 2017 estuvo al aire en Radio Nacional.
Conocido como El Gaucho, había nacido en 1938 en Chascomús. Debutó en la música a los ochos años y luego se afincó en Uruguay, de donde eran sus abuelos. En tierra orienta alcanzó popularidad en Radio Carve y en Radio El Espectador, donde trabajaba como locutor un joven Alfredo Zitarrosa.
Volvió a la Argentina en los 60 y compartió escenario junto a figuras como Los Chalchaleros, Los Hermanos Ábalos, Raúl Barboza y Julia Elena Dávalos, entre otros. En ese contexto, comenzaron a sonar sus obras más reconocidas entre las que destacan "La paloma indiana", "Huella sin huella", "Provincia de Buenos Aires", "Te dije la verdad", "Trovador surero" y "Buen rumbo", entre tantas. Además, actuó en teatro y televisión, por lo general junto a Luis Landriscina, y llegó a participar de festivales en Europa.
En su momento, Horacio Guarany le dedicó estas palabras: "Cuando lo escuchaba, en el exilio, yo sentía que regresaba a mi patria. En la lejana Europa, Omar Moreno Palacios nos congregaba a los argentinos nostalgiosos. Cada vez que teníamos sed de pampa y de nuestra tierra. ¡Ah, las veces que hemos reído y llorado escuchando sus canciones y sus relatos lejos de la patria!".