El juez Marcelo Martínez de Giorgi ya tiene en su despacho los principales datos que conectarían el negocio de los parques eólicos con Gianfranco Macri, el hermano del expresidente y cara visible de algunas de las operaciones del grupo empresario de la familia. El diputado Rodolfo Tailhade, uno de los denunciantes en el expediente, que tramita desde 2018, le pidió directamente al juez que cite a indagatoria a Mauricio Macri y a su hermano, o que pida la detención con fines de extradición de este último, ya que vive en Uruguay. También pidió el llamado a indagatoria del exministro de Energía Juan José Aranguren y del excontador de Socma Víctor María Payaslian.
El disparador de esta presentación tiene como base un hallazgo del diario francés Le Monde y del consorcio de periodistas Organized Crimen and Corruption Reporting Project: la existencia de una sociedad llamada Lares Corporation con sede en Luxemburgo vinculada a Gianfranco que se habría utilizado para camuflar el funcionamiento de una trama de firmas que participaron de la compra y reventa de los parques, en condiciones privilegiadas. Algo que le habría permitido al Grupo Macri obetener una ganancia cercana a los 70 millone de dólares.
La identificación de Lares es fundamental porque podría conducir a la confirmación de que Gianfranco manejó ese negocio cuando su hermano Mauricio gobernaba el país. En Argentina fue informada por el diario La Nación, que integra el consorcio OCCRP. En la causa judicial ya está reconstruida hace tiempo la red societaria utilizada y armada apenas días después de la llegada de Macri a la presidencia.
Sorprendentemente desde hace más de un año también está a disposición del juzgado de Martínez de Giorgi un informe de 600 páginas de la Dirección de Asistencia Judicial en Delitos Complejos y Crimen Organizado (DAJuDeCo) que acreditaba la matriz de vinculaciones de la familia Macri y el recorrido de este negocio millonario, con la característica de que en todas las operaciones estaba un contandor de Socma y del grupo, Mariano Payaslián.
En su nuevo escrito, Tailhade pide la indagatoria de Payaslian y también del exministro de Energía, Juan José Aranguren, cuya cartera intervino en la aprobación de las operaciones de venta de los parques. Aportó también extractos de libro Hermano, de Santiago O'Donnell, donde Mariano Macri, otro de los hermanos afirma que "en el caso de los parques eólicos, Gianfranco hizo de testaferro de Mauricio", algo que el diputado ya había planteado en el expediente, que hasta ahora no tuvo llamados a indagatoria.
La clave de la investigación se supone que apunta a discernir si hubo un tratamiento beneficioso para las empresas de la familia Macri y qué funcionarios fueron facilitadores. La aparición de Lares Corporation indicaría que además de haber sido socios en el negocio, los Macri lo habrían manejado.
Cuando en 2009 se lanzó el plan llamado "Generación de Energías Renovables" (Genren), cuatro parques eólicos fueron otorgados a la española Isolux, vieja socia del Grupo Macri. Lo que se produjo luego fue un pasamanos: sociedades ligadas a los Macri se hicieron de los parques y los revendieron.
Desde la llegada de Macri a la presidencia Payaslian Usir Argentina SA, y a lo largo de 2016, conformó otra llamada Parques Eólicos Miramar y otras dos, Sideli SA y Sidsel SA. Usir resultó controlante de Sidsel y Sideli, que a la vez están vinculadas en alrededor del 10 % a Sideco, de los Macri. Ese año Isolux estaba llena de denuncias por corrupción e incumplimientp de contratos. Por entonces vendió y transfirió las concesiones de cuatro parques eólicos Loma Blanca I, II y III a Sidsel SA y Loma Blanca IV a Sidelli. En esa compra aparecerían incluso invirtiendo los jugadores de Boca Carlos Tévez y Guillermo Barros Schelotto.
Pese a que anunciaba desinversión y estaba casi quebrada, Isolux volvió a adquirir las concesiones de otros dos parques eólicos el 28 de octubre de 2016, en una licitación convocada por el ministerio de Energía, y obtuvo los parques eólicos Miramar, en la provincia de Buenos Aires, y Loma Blanca VI, en Chubut.
Aranguren objetó la adjudicación por los incumplimientos de Isolux, pero todo siguió como si nada. Al poco tiempo, Isolux vendió estos dos parques a las empresas creadas por Paysalian. Para mayo de 2017 las concesiones de los seis parques ya habían sido revendidas: Loma blanca I, II, III, VI y Miramar fueron comprados por la empresa china Goldwind y Loma blanca IV fue adquirido por Genneia, del grupo Brito. Entre lo que se pagó y lo que se obtuvo por la venta, la red de empresas que desemboca en los Macri habría obtenido 69,2 millones de dólares de ganancia.
La ampliación de denuncia de Tailhade pide que se determine si hubo alguna intervención de la llamada "mesa judicial" del gobierno de Macri. Respecto de la compra por parte de Genneia, señala que en sus estados contables la firma "estima haber pagado 40 millones de dólares en una operación que le retribuiría 3 millones y medio de dólares en ochos años, suma muy inferior a la que redituaría colocar ese dinero". El escrito aporta como posible dato relevante que justo una semana antes de que la empresa del fallecido Jorge Brito pagara por aquella suma, el banquero había sido citado a indagatoria en la causa Ciccone.
La investigación dectó una cuenta en Nueva York vinculada a Socma y Sideco, con movimientos de dinero que estarían ligados a Tévez, entre otros. También un préstamo de 5 millones de dólares que recibió Gianfranco Macri a través de Usir "a cuenta de dividendos". Y constató de que Usir SA era filial de Usir International Holding SL, que pertenece a la offshore Luxemburgo Rainbow Finance SA, radicada en Luxemburgo. Todo el circuito desembocaría en Lares. Luxemburgo, vale recordar, es una suerte de paraíso fiscal al que se recurre para generar sociedades o cuentas y ocultar el origen de fondos o los verdaderos dueños de un negocio, por el alto nivel de secretismo.
La gran pregunta es hasta dónde avanzará el juzgado.