Una mujer de Las Lajitas denunció a su ex pareja luego de tres meses de relación en los que relató haber vivido distintos hechos de violencia de género. Lo último fueron lesiones, amenazas de matarse ambos chocando en la ruta y con un arma. El agresor fue detenido pero a la víctima aún no le aclararon por cuánto tiempo y solicita medidas de protección a la justicia para cuando salga este hombre ya que fue amenazada de muerte.
La víctima hace tres meses se encontraba en pareja con Matias Agüero Almada de 32 años. La mujer relató que el pasado martes, luego de haber estado con este hombre, se fue a almorzar con el hijo mayor que estaba de vacaciones en Las Lajitas y ya debía volver a Salta Capital donde reside. Contó que este hombre le envió mensajes y la llamó reiteradas veces con amenazas de muerte, "toda la tarde me torturó con mensajes".
Alrededor de las 19 la fue a buscar en camioneta, ella salió a verlo por temor a que ingresara al departamento ya que la había amenazado con matarla a ella y a su hijo a quien no avisó de esta situación. El hombre la hizo subir a la camioneta, y tomó el camino hacia la ruta, en cuyo trayecto la continuó amenazando de muerte y amagaba chocar adrede para cumplir con ese objetivo.
La mujer contó que se ahogó y pidió a su pareja que se detenga, a lo que accedió. Anteriormente, él le había quitado el celular. Ambos bajaron del vehículo y mientras caminaban, vieron que venía un móvil policial, el hombre le dijo que no le haría nada para que no advierta a los uniformados, pero después volvió a amenazarla para que subiera a la camioneta. En ese forcejeo le torció los dedos y le dejó el hombro marcado tras agarrarla bruscamente.
Según lo relatado en la denuncia, el hombre la llevó hasta el domicilio donde ella vio que cargó un arma y le dijo "vos te hacés la pícara, te voy a hacer pasar la picardía". La mujer consiguió que cerca de las 22:50 la deje en su departamento, pero con la condición de que a las 00:00 en punto pasaría a buscarla. Allí le devolvió el teléfono móvil, en ese lapso de tiempo la mujer comenzó a solicitar ayuda a sus amistades y se contactó con la policía local. Su pareja llegó a la hora que le había anunciado en otro vehículo, como ella no respondía, él le envió mensajes con hostigamientos y amenazas. Llegó la policía y se lo llevó detenido, ella pudo hacer la denuncia.
La mujer contó que este hombre la había golpeado antes, que llegó a ponerle un cuchillo en el cuello y también a colocarle un cinto para ahorcarla y la colgó de donde estaba sentada. Detalló que un día la llevó a orillas del río y le mostró "el lugar donde la cagaría matando".
La víctima se encuentra atemorizada, no tiene asistencia psicológica y ni jurídica. En el área de la mujer de la localidad le dijeron que recién el miércoles o jueves podría atenderla una abogada. Tampoco pudo sacar sus pertenencias de la casa de su ex pareja, donde quedó toda su ropa. La policía le dijo que el hombre estaría detenido 16 días, y ella teme por su vida debido a que ya le había dicho que si lo denunciaba la mataría.
En Salta, las organizaciones de mujeres marcharon el miércoles contra los femicidios, especialmente en repudio por el crimen de Úrsula Bahillo, quien denunció la violencia de género que atravesaba pero que no obtuvo las respuestas institucionales que le salvaran la vida. La falta de celeridad de las instituciones para actuar ante las denuncias de las víctimas y protegerlas, se reiteran en varios de los casos de violencia contra la mujer.
La provincia encabeza las estadísticas por femicidios, y pese a que se han creado algunos dispositivos institucionales, la violencia de género no cesa. En este caso, la mujer de Las Lajitas pidió hacer público lo que le ocurre por temor a que la maten como a otras víctimas de Salta y el país.
Varios casos en la semana
En la semana que pasó, el Ministerio Público Fiscal informó sobre varias causas de violencia de género. En la misma localidad de Las Lajitas fue imputado otro hombre, Ramón Celestino Acosta de 24 años acusado de lesiones leves agravadas por la relación de pareja preexistente y por mediar violencia de género, también por amenazas. La víctima señaló que convivió cuatro meses con el acusado y que tuvieron hechos previos de violencia, pero que no los había denunciado porque éste la mantenía amenazada a ella y a su hija.
La mujer relató que al llegar la pareja de una reunión social, el acusado intentó tener intimidad con ella y ante la negativa se puso agresivo. Cuando ella le dijo que quería terminar la relación, la golpeó, apretó su cuello y la amenazó con matarla. Tras la denuncia, el acusado fue detenido e imputado y desde la Fiscalía se solicitó al Juzgado de Garantías interviniente, que se mantenga su detención.
En La Unión, un hombre de 22 años, Álvaro Efraín Juarez, fue detenido e imputado por agredir a su pareja, con quien tiene un hijo de cinco meses de edad. El sábado de la semana pasada había ingerido bebidas alcohólicas y al día siguiente no quería levantarse a trabajar. Discutieron, se puso violento y agredió a la mujer propinándole golpes de puño, insultos, amenazas y la azotó con un rebenque.
En la denuncia la mujer señaló que ya había vivido situaciones similares y que incluso la amedrentó con un arma de fuego, según informó el Ministerio Público Fiscal. La víctima dijo que el agresor la mantiene amenazada a ella, al hijo en común y a un hijo de cuatro años que tiene por fuera de esa relación.
En la Capital, la fiscal penal 4 de Violencia Familiar y de Género, Elisa Pérez, imputó provisionalmente a un hombre de 26 años, acusado de los delitos de lesiones agravadas por la relación de pareja preexistente y por constituir violencia de género, coacción, amenazas con arma y privación ilegítima de la libertad, en concurso real y en calidad de autor. El agresor sigue detenido.
El sábado 13 de febrero, cerca de las 20, la víctima contó que fue al domicilio del acusado, ubicado en barrio San Benito, en la zona sudeste de la capital provincial, junto a su beba y dos familiares, porque el acusado los invitó a cenar. Relató que se quedaron toda la noche compartiendo bebidas y que a la mañana siguiente, cuando la denunciante quiso retirarse, el acusado no la dejó. Entonces la amenazó diciéndole “Si estás con otra pareja te voy a matar. No me vas dejar. Donde te encuentre, te voy a matar”.
El agresor tomó a la víctima del pelo para arrastrarla y darle un golpe de puño en el ojo derecho. Allí intervino uno de los familiares, quien logró que el acusado la soltara. La denunciante relató que salieron de la vivienda y entraron a un domicilio ubicado a tres casas, donde una mujer les permitió el ingreso para que el acusado no continuara con las agresiones. El violento quiso entrar pero no pudo, minutos después volvió con un machete, y comenzó a gritar “te voy a matar, no te voy a dejar viva” lo que repitió varias veces, hasta que llegó un móvil policial.
En Rosario de Lerma, el fiscal penal Federico Jovanovics, requirió la elevación a juicio de la causa contra un hombre de 21 años, por ser autor de los delitos de lesiones leves, agravadas por la relación de pareja preexistente y por el género y lesiones leves en concurso real en perjuicio de su ex pareja y una menor de 6 años, hija de la víctima.
La mujer radicó la denuncia el pasado 7 de febrero, relatando que, ese día, se encontraba con su hija y el acusado, quien tras ofuscarse y, en estado de ebriedad, comenzó a insultarla y luego ejerció violencia física, contra ambas. La mujer cursa un embarazo de cinco meses. El fiscal solicitó además la prisión preventiva del acusado, basándose en los antecedentes de denuncia de la víctima y en la necesidad de asegurar la comparecencia del imputado en el proceso. El funcionario sostuvo que "en caso de otorgársele la libertad (al agresor), podría entorpecer la investigación y atacar física o psicológicamente a la víctima con el fin de influir en sus declaraciones".
En Capital, el fiscal Federico Obeid, requirió juicio para un hombre de 46 años, imputado por abuso sexual simple continuado, en perjuicio de su cuñada cuando era una adolescente de16 años. El fiscal sostuvo que la víctima después de esta situación presentó estrés postraumático y alteración de la personalidad con desadaptación psicosocial que podrían ser consecuencia del abuso sufrido. La joven radicó la denuncia en mayo de 2020 siendo ya mayor de edad.