El exintendente de Quilmes, Martiniano Molina, se suma a la estructura estatal de Horacio Rodríguez Larreta en la Ciudad. En un contexto de recorte presupuestario a la obra pública, Molina fue contratado como empleado del Ministerio de Desarrollo Económico y Producción para trabajar como asesor en las políticas de desarrollo gastronómico de la Ciudad de Buenos Aires por un sueldo de más de 155 mil pesos por mes. El cocinero, además, será la cara visible del polo gastronómico que el gobierno porteño proyecta crear en el tradicional Mercado de Hacienda de Liniers.
"Desígnese a partir del 1 de febrero de 2021 al señor Martiniano Molina (...) como personal de Planta de Gabinete de la Unidad Ministro del Ministerio de Desarrollo Económico y Producción, con una retribución equivalente a nueve mil ochocientas noventa y cinco (9.895) Unidades Retributivas extraordinarias mensuales, en las condiciones establecidas en el Artículo 9° del Decreto N° 463/19", reza la resolución N° 31 publicada el pasado 8 de febrero. De esta manera, tal como Página/12 había adelantado el año pasado, el gobierno porteño oficializó la incorporación del ex intendente de Quilmes a sus filas. Por su trabajo de asesor en la Subsecretaría de Bienestar Ciudadano (un área del Ministerio de Desarrollo que tiene como objetivo posicionar a la Ciudad de Buenos Aires como "capital gastronómica" en América Latina), Molina ganará un total de 155.721 pesos por mes.
"Martiniano asesora en la reconversión del Mercado de Hacienda del barrio de Mataderos en el nuevo Parque Federal. Allá va a trabajar con productores de todo el país, abordando la totalidad de la cadena de valor de la industria alimentaria y poniendo acento en su sostenibidad y relación con el medio ambiente", explicaron desde el entorno del ex intendente de Quilmes a este diario.
El año pasado, la Legislatura porteña aprobó la creación de un parque temático en Mataderos - un "Disney gauchesco", como lo llaman burlonamente desde la oposición - una vez que se concretara el traslado del Mercado de Hacienda a Cañuelas. La idea era construir allí un polo gastronómico en el que se expusieran y vendieran los alimentos que se producen en diferentes regiones del país, sin embargo la pandemia retrasó todo el proceso y las obras en aquel terreno se encuentran detenidas desde marzo. Dado que poco puede hacer Molina con las obras paradas, desde el Ministerio de Desarrollo Económico y Producción porteño aclararon que el rol de este como asesor excedía su participación en el Polo Federal y que, en cambio, se buscaba que formase parte de todas las políticas y programas en materia de desarrollo gastronómico en la Ciudad.
"Martiniano tiene toda una expertise como cocinero, además de que está muy comprometido con el tema de alimentación saludable y la producción en huertas familiares. Queremos aprovechar su experiencia para potenciar la actividad gastronómica en la ciudad", indicó un vocero del Ministerio de Desarrollo Económico de la Ciudad al justificar la contratación de un exfuncionario de Quilmes de Juntos Por el Cambio como "personal de planta" en el ministerio porteño.
Efectivamente, Martiniano Molina es un cocinero que llegó a la intendencia de Quilmes en el 2015 de la mano de María Eugenia Vidal. Sin experiencia política partidaria hasta entonces, aunque con una fuerte imagen positiva en los medios, Molina logró presentarse como la cara nueva de la política de Quilmes, luego de años de gobiernos peronistas.
Sin embargo, la crisis económica durante el gobierno de Mauricio Macri, así como las críticas hacia su gestión, los recurrentes cambios en el gabinete y una serie de polémicos episodios - como cuando se aumentó el sueldo en un 70 por ciento en plena crisis o como cuando confundió el Pozo de Quilmes, un centro de detención y tortura donde funcionó una maternidad clandestina durante la dictadura, con un problema de bacheo en el municipio -, llevaron a que perdiese la reelección en el 2019 contra la candidata del Frente de Todos, Mayra Mendoza.
Durante la pandemia Molina mantuvo un perfil bajo, pero ahora vuelve aparecer en escena de la mano de Horacio Rodríguez Larreta. Aunque aún falta para definir candidaturas, la campaña de la oposición en la provincia de Buenos Aires ya comenzó a moverse con recorridas, encuentros y guiños varios de diferentes referentes, y la "grieta" ala dura / ala blanda de por medio. La reciente designación también puede leerse en este contexto preelectoral. Se especula con que este año Molina podría competir en las elecciones de medio término por una banca en la Cámara de Diputados bonaerense.
Informe: María Cafferata.