Unos 300 participantes de la asamblea en defensa del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa) consensuó en Rosario un documento que expresa la "preocupación" por los ataques a la "legalidad y transparencia del sector cinematográfico". El inédito encuentro realizado en Plataforma Lavardén el lunes a la noche fue protagonizado por realizadores audiovisuales, productores, técnicos, actores y diversas organizaciones y entidades profesionales, entre ellas la Cámara de Empresas Productoras de la Industria Audiovisual de Rosario (Cepiar), una de las convocantes.

Realizadores, productores, técnicos, estudiantes, organizaciones gremiales, entidades profesionales y escuelas, no dudaron en afirmar en el texto acordado que "en los últimos meses a partir de acciones políticas y operaciones mediáticas se ha tratado de instalar en la sociedad un cono de dudas acerca de la legitimidad, legalidad y transparencia del sector cinematográfico, practicando denuncias cargadas de errores y falsedades con el único motivo de confundir a la población, que está ajena a este conflicto, acerca de la realidad de la industria cinematográfica".

"Estas acciones políticas no tienen otro objetivo que desgastar una industria clave en la conformación de nuestra identidad cultural y que hace a la defensa de nuestra soberanía", remarca.

"Desde Rosario y la provincia de Santa Fe entendemos que este es un problema que afecta a todo el país y a la comunidad artística en pleno como así también está en riesgo gran parte del desarrollo de la industria cultural nacional. Creemos que debemos tomar parte en esto solidarizándonos con todas las acciones que se realicen en pos de la defensa del Fondo de Fomento y del acompañamiento a todas las entidades locales y nacionales que impulsen el debate, la discusión y la movilización del sector en función de la defensa de nuestro cine", agrega.

El texto acordado propone "defender la autarquía del Incaa y la plena vigencia de la ley de cine", "exigir que no se afecten los mecanismos de financiamiento", "defender la ley vigente de servicios audiovisuales y su plena aplicación" y "repudiar las operaciones de desprestigio del cine nacional", entre otros puntos.

"Si el cine es el reflejo en donde nos miramos, esta política nos llevará a perder nuestro reflejo como así también nuestra identidad", finaliza el documento.