Cuando parecía que la semana millonaria ya había agotado sus sinsabores con la salida de Nacho Fernández, el anuncio del adiós de Leonardo Ponzio y el diagnóstico de mononucleosis de Gonzalo Montiel, el jueves se conoció que todavía tenía reservado uno más. Y uno que, además, puede escalar en mayores magnitudes para River. Se trata de la noticia difundida por el propio club de que el preparador físico del cuerpo técnico, Pablo Dolce, dio positivo de coronavirus y permanecerá, hasta su recuperación, aislado del plantel, que por su parte deberá esperar a los hisopados de control previos a su partido ante Platense para conocer si hubo o no algún contagio.

Dolce, "testeado por presentar síntomas", es uno de los cuatro preparadores físicos del cuerpo técnico de Marcelo Gallardo junto a César Zinelli, Diego Gamalero y Marcelo Tulbovitz. El colaborador del "Muñeco", según informó la institucón, ya fue aislado del plantel.


El caso de Dolce encendió el alerta por su cercanía con el plantel y, además, porque se suma a la situación del defensor Montiel, quien desde el miércoles está en reposo por un cuadro de mononucleosis. Según trascendió, el técnico podría darle el lateral derecho a Milton Casco, que tiene experiencia en el primer equipo, o apostar por Alex Vigo, quien recientemente se incorporó a la institución.

Más allá de la noticia del positivo de Covid-19, los dirigidos por Gallardo se entrenaron con normalidad en el River Camp y trabajaron ejercicios físico-técnicos, en tanto que este viernes, antes de la práctica programada para las 9, se someterá a nueva tanda de hisopados. 


Tanto Gallardo como el hincha de River esperan la misma cosa: que ya terminen las malas noticias vinculadas al plantel, que los resultados de los testeos del viernes no comprometan a ningún jugador, y que el partido del domingo ante el Calamar, por la tercera fecha de la Copa de la Liga, inaugure un nuevo tiempo de alegrías.