El Ministerio de Desarrollo Social realizó un primer balance del plan de contención social para los sectores vulnerables: desde octubre hasta febrero, se crearon 89 mil puestos de trabajo; se realizaron tareas de urbanización en 106 barrios; y se pusieron en marcha 269 jardines maternales y comunitarios.

El plan de contención tomó forma entre la urgida contención de la situación social que dejó la pandemia en materia de pobreza e indigencia y los debates teóricos que el ministro de Desarrollo Social Daniel Arroyo quiere poner en la práctica para lograr que esos 18 millones de argentinos pobres que calculó el Observatorio de la Deuda Social de la UCA no se conviertan en un nuevo piso estructural de pobreza en Argentina.

Para responder a la urgencia, el gobierno aumentó un 50 por ciento el monto que 1,5 millones de familias pueden utilizar con para comprar alimentos y bebidas no alcohólicas con la tarjeta Alimentar que llega a 1,5 millones de familias. Además de sostener el poder de compra, con este aumento el ministerio pretende mejorar la calidad nutricional. Se apunta a que con un aumento del dinero se pueda recuperar el consumo de leche, carne, frutas y verduras, que en abril representaba el 62 por ciento de las compras con la tarjeta y luego fue bajando. En julio llegó a un 46 por ciento hasta llegar al 55 por ciento en diciembre, producto de que hubo un refuerzo monetario específico en la tarjeta.  

De cara al 2021, el Ministerio decidió ir más allá de la asistencia alimentaria, que el año pasado significó un 80 por ciento del presupuesto de la cartera, para darle una impronta que reconvierta el esquema productivo de las clases bajas a través de la generación de empleo en distintos sectores: "El eje central este año está puesto en el tema del trabajo. A diferencia del 2020, el presupuesto 2021 se destinará 50 por ciento a asistencia alimentaria y 50 por ciento a la generación de trabajo a través de distintos instrumentos", informó el ministro. 

Trabajo

El ministerio identificó a 89 mil personas que obtuvieron durante tres meses consecutivos ingresos por encima del salario mínimo, vital y móvil. Algunas de las personas registradas cobran una parte del salario con Potenciar Trabajo, otras accedieron al Programa de Máquinas y Herramientas y las que accedieron a Créditos no Bancarios del 3 por ciento anual para capital de trabajo y pudieron generar ingresos por encima del salario mínimo, vital y móvil. 

Urbanización

El Gobierno pretende urbanizar 400 barrios y asentamientos por año en un país con  4.400 barrios populares, donde viven 4 millones de personas en villas, barrios y asentamientos. Para llevar adelante esta urbanización existe un registro de barrios populares, y cada gobernador fija sus prioridades. 

El plan busca por un lado urbanizar, abrir calles, poner servicios básicos  y por otro mejorar las viviendas existentes como mejorar o sumar una cocina o un baño. Y como aspecto más ambicioso, pretende generar lotes con servicios en tierras fiscales que el Estado tiene a partir de la construcción del ferrocarril y que quizás pueda usarse para construir barrios en mejores condiciones que los actuales

"En parte, estos fondos para la urbanización provienen del impuesto País vinculado al dólar. También vendrá una parte de la contribución de las grandes fortunas, una parte irá a la urbanización. Pero al margen de esto último, ya hay un presupuesto propio”, explicó Arroyo.

Jardines

Otra de las metas de la cartera de Desarrollo aunque en conjunto con el ministerio de Infraestructura es la creación de 800 jardines: "Más de la mitad de los chicos en Argentina es pobre y la clave para achicar las desigualdades que todos los chicos puedan ir al jardín de infantes", aseguró el ministro. 

"De estas tres metas, la más compleja para nosotros es el tema de los jardines, porque hace falta conseguir las tierras, construir, etc. La meta del trabajo no depende solo de nuestra voluntad sino de cuánto tira la economía o no; y con los barrios tenemos el financiamiento del fideicomiso por el impuesto país", se sinceró el ministro luego de afirmar que interpreta este primer balance de gestión "con buenos resultados".

Pobreza

Según la UCA, la pobreza alcanzó a 18 millones de personas, 44 por ciento en 2020 y la indigencia al 10,1 por ciento de los argentinos. De acuerdo al mismo informe, sin la AUH, el IFE, la Tarjeta Alimentar y el resto de los subsidios, la indigencia hubiera sido el doble y la pobreza hubiese trepado al 53 por ciento. La cartera de Desarrollo Social es consciente de este hecho y no descarta un IFE IV en el caso de un rebrote que obligue a cerrar los comercios y la industria. 

El ministerio cuenta con proyecciones de pobreza aunque no quiere hacerlas públicas porque "dependen de varios factores que no podemos controlar". Sin embargo, aseguran que la cantidad de gente que asistió en los comedores sí bajó: se encontró en un pico entre abril y julio, pero en los últimos cinco meses fue bajando, sobre todo, por un aumento de las changas de construcción y textil.