Los contagios de coronavirus en Italia siguen al alza y en el último día se han confirmado 20.499 nuevos positivos y 253 muertos, según el último boletín del Ministerio de Sanidad, y varias regiones aumentarán sus restricciones ante este contexto.
En total se han contagiado 2.888.923 personas desde que dio comienzo la emergencia sanitaria hace un año. Este miércoles además se registraron 253 fallecidos, 55 menos que ayer, lo que eleva el cómputo total a 97.227 muertos. Desde ayer se han registrado 20.499 nuevos casos de coronavirus, 613 más que el jueves, tras varios días al alza, pese a que el número de pruebas fue menor, casi 30.000 menos.
Por otro lado aumenta la presión en los hospitales y varios ya han superado el nivel de alerta. De los actuales 404.664 enfermos con la covid-19, 18.292 se encuentran internados, 61 más que el día anterior, y 2.194 personas están en terapia intensiva, 13 más que el d.
La campaña de vacunación continua en Italia alcanza el total de 3.998.727 dosis inoculadas en todo el país. Además, 1.370.373 han recibido ya la vacuna completa y se consideran inmunizados.
Así se cumple la cuarta semana consecutiva con los contagios en aumento en Italia, golpeada por las variantes del virus, y se espera que el Ministerio confine como "zona roja", zonas de máximo riesgo, las regiones de Molise (centro) y Basilicata (sur).
También aumentarán las que se encuentran en "zona naranja" o de riesgo intermedio, a la que se sumarán Lombardía y Piamonte (norte) y las Marcas (centro). En el caso de Lombardía preocupan especialmente las provincias de Brescia y de Bérgamo, esta última símbolo de la tragedia hace un año.
Entre las zonas naranjas estaban ya Emilia-Romaña, Liguria, Toscana y las provincias autónomas de Bolzano y Trentino (norte), Campania (sur) y los Abruzos y Umbría (centro). El resto de regiones, como el Lazio, con Roma como capital, se mantendrán como "zona amarilla" o de bajo riesgo. Por primera vez una región, la isla de Cerdeña, podría ser decretada como "zona blanca", la nueva clasificación para territorios prácticamente sin limitaciones.
Por otro lado, el primer ministro, Mario Draghi, ha nombrado a Fabrizio Curcio jefe de Protección Civil sustituyendo a Angelo Borelli, el encargado de dar las cifras diarias ante el país cada día en los peores meses de la emergencia sanitaria.
Mientras tanto, a pesar del crecimiento de contagios, el ministro italiano de Cultura, Dario Franceschini, anunció este viernes que Italia reabrirá sus cines y teatros desde el próximo 27 de marzo en las zonas de menor riesgo de contagio de coronavirus, tras obtener el beneplácito de los técnicos que asesoran al Gobierno.
El comité técnico y científico aceptó la petición de Franceschini de reabrir los cines y teatros, pero se deberá respetar una serie de criterios de seguridad que ahora tendrán que ser estipulados por el Ejecutivo en un decreto. El ministro adelantó que estos espacios culturales abrirán desde el 27 de marzo, Día Mundial del Teatro, y desde entonces también se permitirá la reapertura de los museos el fin de semana, previa reserva.
El pasado miércoles, el titular de Cultura trasladó a los asesores científicos una serie de protocolos para obtener el permiso de reabrir cuando antes los cines, los teatros y las salas de conciertos. Las reaperturas solo serán posibles en las consideradas como "zonas amarillas", áreas del territorio italiano con el menor riesgo de contagio, como por ejemplo la capital, Roma, donde las limitaciones son menores.
Los cines y teatros deberán reducir notablemente su aforo y el uso de la mascarilla será obligatorio. Los cines tratan de evitar la quiebra después de estar cerrados prácticamente un año, tras el estallido de la pandemia, excepto en el periodo entre el 15 de junio y el 26 de octubre, cuando abrieron.
En todo este tiempo han dejado de recibir 60 millones de personas en sus salas, lo que representa unas pérdidas de 420 millones de euros (cerca de 510 millones de dólares) en las taquillas, según la asociación de gestores ANEC en un informe parlamentario de noviembre pasado.