Desde Salta
Kerem Schamberger es un estudiante doctoral del Departamento de Estudios de Comunicación e Investigación de Medios en la Universidad de Munich. Schamberger focaliza su análisis en el sistema de medios pero su mirada atraviesa el concepto liberal de “libertad de prensa”, a veces equiparado al nivel de presión de los gobiernos. Schamberger analiza las restricciones a los medios y a la autonomía de los periodistas impuestas por el mercado y las corporaciones, es decir por la estructura económica política de propiedad de los medios y la distribución de la publicidad privada.
Un enfoque crítico centrado en la presión del mercado y las corporaciones en los medios resulta poco usual en la normatividad heterodoxa de los estudios europeos y norteamericanos de la comunicación. En realidad es una mirada que en algún sentido encuentra sus raíces en los estudios latinoamericanos de comunicación. Los cuáles vienen desde hace décadas llamando la atención sobre la “doble espada de Damocles” que pende sobre los medios: de un lado la presión gubernamental, del otro la presión de las empresas.
Probablemente el aumento de investigaciones de este tipo en el “viejo mundo” encuentre su fundamento en los cambios drásticos sociales, tecnológicos, políticos y económicos que viene sufriendo el sistema mundial de medios masivos de comunicación.
Por una parte investigadores de la talla de Martín Becerra vienen señalando que, con la propagación de internet, la domótica y la convergencia tecnológica de las comunicaciones, los grandes medios tradicionales (New York Times, Der Spiegel, Le Monde, The Guardian, CNN, Fox News Channel, etc.) enfrentan hoy un escenario adverso frente a los nuevos “predadores anfibios” nacidos en, o al calor de, Silicon Valley (Google, Facebook, Apple, Amazon, YouTube, etc.) Aunque enfrentan cargos en la comisión europea por abuso de posición dominante, estas nuevas corporaciones digitales conquistan cada día una porción mayor en la circulación y distribución de información y noticias. Mientras que la facturación por publicidad en papel en USA cayó de 47 mil millones de dólares en 2005 hasta los 16 mil millones en 2014 según el Pew Research Center, Google realizó negocios por 75 mil millones de dólares en 2015, principalmente derivados de la publicidad.
Desde otra perspectiva reconocidos periodistas como Ignacio Ramonet y activistas como Julián Assange vienen advirtiendo sobre los peligros de la manipulación y concentración de información en tan pocas manos de corporaciones digitales. Para Ramonet estas grandes empresas están imponiendo nuevos estados de vigilancia clandestina. Facebook y compañía registran y utilizan una cantidad abrumadora de información de los usuarios con fines poco claros y aún menos democráticos. Assange acusa a Google directamente de espionaje ilegal masivo a los usuarios y de trabajar colaborativamente para la inteligencia estadounidense (NSA). En el mismo sentido numerosos investigadores indican el sostenido crecimiento de la concentración de medios en el mercado mundial durante las últimas décadas. Dejando de lados los casos latinoamericanos, más conocidos por su cercanía, en USA e Inglaterra Fox News, The Sun y The Wall Street Journal pertenecen al magnate Rupert Murdoch, investigado por corrupción y soborno en UK.
Periodistas, activistas e investigadores coinciden en calificar la suma de estos hechos como un contexto mediático internacional preocupante para el desarrollo pleno de la democracia y los derechos ciudadanos.
Kerem Schamberger y su investigación en Alemania podrían haber pasado desapercibidos. Pero su caso tomó relevancia internacional cuando su beca doctoral y docencia fue objetada por el gobierno de Bavaria debido a que Schamberger es militante del partido comunista. Podría ser un caso aislado, pero toma otro matiz si lo vinculamos con hechos similares ocurridos en otras partes del mundo. Sin ir lejos, en el plano local, recientemente se conoció que el CONICET reducirá el número de nuevos investigadores y la mitad de los cupos se destinaran a temas estratégicos. Un dato menos conocido es que ahora “las designaciones (de investigadores) efectuadas cuentan con la intervención, respecto de sus procesos administrativos, del Ministerio de Modernización prevista en el Decreto 227/16”.
Un panorama político internacional complejo, que avizora nubes negras en el plano económico, político y social con bloques continentales que muestra fisuras, democracias que no logran consolidarse y masas que tienden a defenderse con reacciones xenófobas y liberales, sumado a un ecosistema mediático concentrado en pocas fortunas y donde la información tiene cada vez más importancia pero paradójicamente su distribución es cada vez más manipulada, nos obliga a pensar sobre la importancia estratégica de investigaciones como las que lleva a cabo Kerem.
* Licenciado en Ciencias de la Comunicación de la UNSa, becario Conicet.