Florencia Hernández tiene 22 años, cursa el cuarto año de la carrera de Ciencia Política y Gobierno en la Universidad Nacional de Lanús (UNLA), y es jefa de la Anses de San Francisco Solano, Quilmes. Pero, además, es la persona más joven en integrar “Unidad y Federalismo”, la lista encabezada por Alberto Fernández para la conducción nacional del Partido Justicialista. Forma parte de esa nueva generación que busca “rejuvenecer” al partido, que ve la política “compuesta por buenas personas” y que la militancia encuentra su motivo de ser en los otros: “Si vos te ponés a militar es porque te importa la vida del otro”, sostuvo en diálogo con PáginaI12. Sobre los prejuicios en torno a su edad, considera que son “un fantasma que hay que romper”: “Si partimos de que lo que hay que discutir es la forma en la que vivimos los vecinos y vecinas de Quilmes u otros lugares, de ahí para adelante va a ser mucho más fácil llegar a acuerdos”.
Hernández comenzó su militancia movida por “una especie de curiosidad o necesidad de hacer algo por el otro, y entendiendo que para eso había que involucrarse en política”. Interpelada por las formas de hacer política de La Cámpora, y habiéndose enterado de que la organización “hacía jornadas solidarias en escuelas y sociedades de fomento” en el partido de Quilmes, rápidamente empezó a militar en la unidad de su localidad, San Francisco Solano.
Lo hizo en un momento muy particular de la escena política argentina: antes de la campaña para el ballottage del 2015, que finalmente supondría la primera vez que una coalición de derecha llegaría a la Presidencia del país a través de la elección democrática. Pero, más allá del resultado, para Hernández “fue el mejor año dentro de la organización”. “Ese año fue bastante intenso: mi último año de secundaria, campaña presidencial y el último año de Cristina, que para mí fue inolvidable porque pude participar de todos los patios militantes”, cuenta. Recuerda también que, en ese entonces, algunos compañeros en la escuela le decían que la militancia no sería más que un “hobby”. Pero no fue así, sino todo lo contrario. “Cuando te querés dar cuenta es una forma de vida”, expresa la joven militante: “Estás todos los días pensando qué vas a hacer para la organización, entendiéndola como un montón de personas que pensamos que las realidades injustas hay que detectarlas pero, sobre todo, transformarlas”.
Sus decisiones fueron acompañadas y, de alguna forma, también inculcadas por su madre. Docente en el barrio La Matera, “un barrio con realidades complejas, un lugar que sufrió mucho olvido”, Florencia vio por primera vez en ella eso que le gustaba: estar, acompañar, ayudar, transformar. “Al principio era una chica de 17 años que se iba muchas horas a actividades y jornadas solidarias”, cuenta la actual jefa de la Anses de Solano, y explica que eso fue difícil para su mamá, “como con cualquier chico adolescente que está fuera de su casa”. Pero rescata con orgullo la libertad que le dio “de poder elegir” y de poder hacer de “su vida política una práctica del día que sea algo transversal con mis aspectos personales”. Incluso, su mamá y su hermana, personas que “no venían de la política” también comenzaron a militar junto a ella.
Hoy es la persona más joven en integrar la lista de unidad federal y con paridad de género que el presidente Alberto Fernández presentó para renovar la conducción del PJ nacional. Allí figura como consejera suplente. “Me generó felicidad, pero entiendo que no voy yo sino que van un montón de compañeros que militan”, expresa Hernández. “Nosotros no militamos por un lugar en una lista, pero sí es un reconocimiento que me pone contenta, porque siento que el trabajo de la militancia diaria lo tienen en cuenta un montón de otros compañeros. Y el logro es colectivo, de todos los compañeros y compañeras de Quilmes”, sostiene firmemente.
Sus referentes son claros, tal vez los mismos de muchos militantes jóvenes del kirchnerismo: “Siempre me había interpelado la forma de hacer política de La Cámpora, una forma que no era casualidad sino que venía de dos militantes peronistas como Néstor y Cristina que inculcaron eso en una organización política y en un montón más”. Máximo Kirchner también se alza como una figura de gran importancia para ella, en tanto lo entiende como quien “genera una síntesis entre La Cámpora y otras organizaciones”, ya que se sienten interpelados por la simpleza y, a la vez, la profundidad de sus discursos. Y, por supuesto, Mayra Mendoza, a quien conoce desde los 16 años. “Tuve la suerte de aprender de ella, como diputada nacional y ahora intendenta, que también habla de la grandeza que tiene generando cuadros constantemente, lo que le da también perdurabilidad al movimiento”, expresa Hernández.
Ante la pregunta sobre su futuro en la política, no duda en responder que se ve “siempre militando, obviamente”. “En el peronismo, en el kirchnerismo, en La Cámpora y con la responsabilidad que a una le toque: lo individual viene siempre después de lo colectivo, lo que sea mejor para la organización y para el peronismo será lo mejor para una”, agrega.
Es que no tiene ninguna duda de que “el camino es siempre la organización política”, y que los logros son colectivos. “Así como hoy estoy asumiendo un lugar de responsabilidad, hubo un montón de compañeros que fueron ejemplo para nosotros, y ojalá nosotros ayudemos con lo que estamos haciendo hoy al camino que van a tener que hacer generaciones que vengan atrás”, sostiene Florencia, y remarca que eso es lo que le dará continuidad “a nuestras ideas, a nuestro proyecto a largo plazo para que todos los argentinos tengan una vida digna”.
“Si solamente nos quedamos con los que somos hoy, nuestro proyecto tiene fecha de vencimiento”, considera la joven política. Es por eso que entiende, promueve y milita por y para ampliar la política, para integrar desde la política a jóvenes, adultos, mujeres, hombres, a todos y todas.
“Nosotros creemos que cada vecino que entra a la política le hace muy bien, sobre todo porque queremos cortar con eso de que la política es para unos pocos”, explica, y agrega: “Cuantas más personas se involucran, menos margen de error tienen la política y el Estado a la hora de gobernar”.
Informe: Sofía Moure.