Mientras que en gran parte del país se celebraba el inicio la campaña de vacunación de docentes, desde UTE-Ctera tuvieron que enviarle una carta al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, para reclamarle que implementase el plan de vacunación entre los trabajadores y trabajadoras de la Educación en la Ciudad de Buenos Aires. Luego de que el ministro de Salud de la Ciudad, Fernán Quirós, anunciase que las dosis de la Sinopharm estarían destinadas al personal de Salud que aún no había sido inmunizado, desde el gremio docente salieron a reclamarle al gobierno porteño que cumpliese con lo acordado en el Consejo Federal de Educación respecto a la vacunación del personal docente.
El miércoles a la mañana, durante su habitual reporte diario, el ministro Fernán Quirós anunció que la partida de vacunas Siopharm se destinaría a completar la inmunización del personal de salud de menos de 60 años, pero "no por ahora a los trabajadores docentes". La declaración generó la rápida respuesta del gremio UTE, que replicó enviándole una carta al jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta intimándolo a poner en marcha el plan de vacunación de docentes y no docentes en el territorio porteño.
"La postura del Ministerio de Salud de la Ciudad de Buenos Aires contraría a la declamada prioridad de la educación exteriorizada por la gestión del GCBA, implicando lisa y llanamente el total desconocimiento de las prescripciones contenidas en el art. 11 de la Resol. 386/2021 del Consejo Federal de Educación", comienza la carta que lleva la firma de la secretaria general de Ctera, Sonia Alesso, y la secretaria general de UTE Capital, Angélica Graciano.
"Queremos que Larreta cumpla con lo que prometió. De las vacunas que llegaron de China hay unas 33 mil que les corresponden a los maestros porteños", explicó el secretario adjunto de UTE, Eduardo López, a Página/12. "Se está vacunando simultáneamente a diferentes poblaciones, vimos que ya empezaron con los mayores de 80. ¿Por qué no los docentes? No hay que pelearse entre trabajadores, lo que pasó es que las vacunas que tenían para los médicos terminaron en manos de las prepagas y Quirós se quedó sin vacunas para ellos, entonces utiliza las que iban a ser para los docentes", argumentó.