Un estudio del Conicet arrojó nuevas conclusiones sobre la respuesta inmune a la Sputnik V en Argentina. La investigación, en la que participaron cientos de voluntarios que forman parte del personal de salud, brinda nuevas sugerencias para la inoculación de aquellas personas que se infectaron previamente con el virus y luego fueron inmunizadas.
El estudio indica que en estos casos podría no ser necesaria una segunda dosis. Los científicos argentinos detectaron que la cantidad de anticuerpos en personas previamente infectadas que recibieron una sola aplicación de la vacuna es ocho veces superior a la de aquellos voluntarios sin infección previa que recibieron el esquema de vacunación de dos dosis, como estipula actualmente el protocolo de la vacuna rusa en el paìs.
Este hallazgo avalaría revisar el esquema de vacunación para aquellas personas con antecedentes confirmados de infección por el coronavirus, lo que permitiría optimizar recursos sin comprometer la eficacia de la inmunización.
El Ministerio de Salud ya convocó a una reunión para el próximo martes con el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación para analizar el estudio de referencia. Ante la expectativa que generó el estudio, aclararon que no está bajo evaluación dejar de dar la segunda dosis de Sputnik V a las personas que tuvieron covid-19.
“Los resultados del estudio muestran que las personas previamente expuestas al virus, que mostraron tener anticuerpos antes del inicio de la vacunación, generan una respuesta inmune humoral rápida al recibir una dosis de la vacuna Sputnik V, produciendo niveles de anticuerpos similares e incluso superiores a los producidos por personas no infectadas que recibieron dos dosis de la vacuna”, afirmó la jefa del Laboratorio de Virología Molecular de la Fundación Instituto Leloir (FIL), investigadora superior del CONICET y miembro del equipo que realizó el estudio, Andrea Gamarnik.
“Estos resultados sugieren que la infección previa genera memoria inmunológica que se evidencia con la primera dosis de Sputnik V produciendo niveles aumentados de anticuerpos en comparación con individuos no infectados previamente”, puntualizó por su parte el investigador superior del CONICET en el Instituto de Investigaciones Biomédicas en Retrovirus y SIDA (INBIRS) -que depende del CONICET y la UBA- y miembro del equipo que realizó el estudio, Jorge Geffner.
Cómo fue el estudio
En la primera etapa de la investigación se analizó la respuesta inmune de 142 trabajadores de la salud que se ofrecieron como voluntarios (edad=18-59 años) de siete centros públicos de la Provincia de Buenos Aires, de los cuales 22 habían estado previamente infectados con el nuevo coronavirus.
Según explicaron, en este proyecto se analizaron 600 muestras de suero y se realizaron más de 3000 determinaciones para la cuantificación de anticuerpos del tipo IgG contra la proteína Spike del virus, como así también la cuantificación de anticuerpos neutralizantes de la infección. Para esto último se evaluó la capacidad que tiene el suero de impedir que el SARS-CoV-2 infecte a una célula. Esta es una medida de cuan protectores son los anticuerpos generados.
Paso a paso
Los científicos argentinos tomaron muestras de suero previo a la vacunación (nivel basal), a los 21 días de haberse aplicado la primera dosis de Sputnik V y a los 21 días de haberse aplicado la segunda dosis.
Las muestras recolectadas en la provincia de Buenos Aires fueron transportadas y analizadas en el Laboratorio de Serología de la FIL, coordinado por Andrés Rossi y Anabel Alvarez Juliá, utilizando para ello el test COVIDAR IgG desarrollado en el instituto, así como pruebas adicionales para medir la capacidad neutralizante de los anticuerpos realizadas en la FIL y en el INBIRS.
Los resultados
El estudio mostró que el esquema completo de la vacuna rusa indujo una respuesta humoral contra la proteína Spike del nuevo coronavirus en el 100% de voluntarios analizados en el estudio después de la segunda dosis. Pero también reveló que la mediana de título o cantidad de anticuerpos en personas previamente infectadas que recibieron una sola dosis de la vacuna es ocho veces superior a la de aquellos voluntarios sin infección previa que recibieron el esquema de vacunación de dos dosis.
“Estos resultados muestran que la respuesta humoral de memoria de personas previamente expuestas al virus es robusta y parecería ser superior a la desarrollada después de dos dosis en personas que no se enfrentaron con el virus previamente”, destacó Gamarnik, líder del desarrollo de los kits COVIDAR IgG.
En números
Tras la aplicación de la primera dosis de Sputnik V, la respuesta inmune contra el coronavirus en el grupo con previa infección mostro una mediana en la cantidad de anticuerpos muy alta. Ésta llegó a un valor de 12.800 (lo que mide cuantas veces se puede diluir el anticuerpo y aun detectar su actividad), y el otro grupo (sin previa infección) mostró un valor medio de 200.
Tras la segunda dosis, la cantidad de anticuerpos en el grupo sin previa infección saltó de 200 a 1.600, mientras que en el grupo con previa exposición a SARS-CoV-2 no se observaron diferencias significativas tras comparar el nivel de anticuerpos después de una y dos dosis de vacuna.
Los investigadores también evaluaron la capacidad de los sueros de los voluntarios vacunados para neutralizar la infección viral. “Los resultados fueron consistentes con el análisis de títulos de IgG totales, mostrando que la cantidad de anticuerpos neutralizantes en el grupo con previa infección fue superior con una dosis a la del grupo sin infección después de recibir la segunda dosis”, remarcó Gamarnik.
Estudios similiares en el mundo y con otras vacunas
Estudios anteriores en infectados de países como Francia y España habían arrojado resultados similares con las vacunas de Pfizer/BioNTech y Moderna. En ambos países se adoptó la política de reducción de dosis en ciertas franjas etárias para optimizar recursos.
“Sin embargo, no había estudios hasta el momento con la vacuna Sputnik V que comparasen los niveles de respuesta inmune de individuos vacunados con dos dosis con individuos vacunados con una dosis con exposición previa a SARS-CoV-2”, afirmó Gamarnik, para quien “los datos obtenidos en el presente trabajo son una muestra de la importancia del trabajo conjunto entre científicos, profesionales de la salud y autoridades para generar información en nuestro país”.
“Los resultados preliminares de este estudio entusiasman mucho, son muy valiosos para la toma de decisiones en relación a la campaña de vacunación y la donación de plasma como tratamiento para COVID-19”, puntualiza la asesora biotecnólogica del Gabinete de Asesores del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires, Dra. Marina Pifano. “Contar con evidencia local sobre la respuesta a las vacunas, en este caso la Sputnik V, generada por nuestros hospitales públicos e instituciones de investigación prestigiosas de nuestro país permite mejorar el enfoque de las políticas públicas”, añade.