Ante lo que consideró como hechos “preocupantes” y que “deben erradicarse en pos de mejorar la democracia”, Fernando Olivera, delegado del INADI en Catamarca, contó que este año tiene previsto un plan de trabajo con los diferentes intendentes y funcionarios comunales de la provincia, para evitar que se repitan situaciones “agraviantes, amenazantes, discriminatorias y antidemocráticas”, como la protagonizada el lunes por el intendente de Recreo, Luis Polti, durante la apertura de sesiones del Concejo Deliberante, y que vienen denunciándose en la Delegación.
Olivera señaló que los dichos de Polti, quien trató de “vagos y drogadictos” a los trabajadores de la comuna, lo decidieron a realizar el plan de trabajo y capacitación “que el contexto de la pandemia no me permitió encarar el año pasado, pero al ver que continúan dándose, entiendo que ya no pueden dejarse pasar bajo ningún motivo”.
El delegado se refirió también a las declaraciones realizadas por el jefe comunal de Londres, Gilberto Santillán, el año pasado, quien animó al pueblo a echar a los “hippies” de la zona de El Shincal. En tanto, ayer una mujer denunció a un delegado comunal de la localidad de Lavalle del departamento Santa Rosa por escupirla en la cara.
“Hemos tomado conocimiento de varias situaciones gravísimas y que no pueden estar sucediendo en pleno siglo XXI”, dijo Olivera respecto de esos hechos ocurridos. Es por esto que se acordó una serie de visitas que forman parte de un plan de trabajo en el que la delegación del INADI pueda tener contacto con las autoridades de los diferentes municipios, en donde además de capacitar, se proponga la aplicación de la Ley Micaela y se puedan erradicar algunas prácticas como las antes citadas.
De acuerdo con la Ley 23.592, de Actos Discriminatorios, y la normativa vigente en el país, se entiende por discriminación toda distinción, exclusión, restricción o preferencia basada en motivos arbitrarios y que tenga por objeto o resultado anular o menoscabar el reconocimiento, goce o ejercicio, en condiciones de igualdad, de los derechos fundamentales reconocidos en la Constitución Nacional, un tratado o una ley.
Los casos
Él último caso, que Olivera calificó como discriminatorio, sucedió esta semana durante la apertura de sesiones del Concejo Deliberante del departamento Recreo. Allí, el intendente Polti se despachó diciendo que cuando termine su gestión dejará “un municipio que produzca y no de vagos y drogadictos”. Sus dichos provocaron el malestar y repudio de los asistentes.
Polti fue grabado el año pasado por una enfermera mientras le levantaba la voz y la maltrataba. La mujer grabó el momento en que le pidió barbijos para trabajar. Luego ese audio fue difundido en los medios locales donde se lo puede escuchar a jefe comunal mientras le grita, la suspende en sus actividades y además la amenaza con echarla. "Me vas a dejar hablar a mí porque yo soy el intendente", iniciaba aquella conversación.
Polti aseguró en aquel momento que era él quien había sido víctima de violencia de género y aseguró que denunciaría penalmente a la enfermera por grabarlo a escondidas. Tras tomar trascendencia nacional el caso, el gobernador Raúl Jalil lo llamó y le pidió que revea su decisión.
El intendente también había sido detenido el año pasado por violar la cuarentena para ir a pescar junto a otros funcionarios de la misma comuna.
Delegado
Ayer jueves, Eliana Leguizamón, una vecina de la localidad de Lavalle del departamento Santa Rosa, denunció penalmente al delegado comunal, Miguel Leguizamón, por insultarla y escupirle en la cara luego de que ella le reclamara que hiciera defensas con tierra para evitar inundaciones en su barrio.
Sin poder creer lo sucedido, la mujer le contó a Catamarca/12 que el funcionario “tiene denuncias por maltrato a una maestra, y antecedentes de haber escupido a otra vecina de la zona, una señora mayor”.
“Quiero hacer público esto porque no pude seguir pasando. Hice la denuncia en la policía y quiero que llegue a manos del fiscal es por eso que también lo hago público. Es violencia y abuso de autoridad”, señaló.
Londres
El caso de Londres se registró el año pasado, pero no trascendió mediáticamente. La localidad, forma parte del departamento Belén en Catamarca y está ubicado a 15 kilómetros de la cabecera departamental. Ahí se encuentra la zona de El Shincal. Santillán lleva 20 años al mando de esa comuna.
En octubre último este intendente fue entrevistado por FM Quimivil y consultado por el locutor por un allanamiento donde la policía secuestró plantas de marihuana, semillas, aceite de cannabis y goteros. Santillán llamó a los vecinos a organizarse en plena pandemia para echar del pueblo a las familias allanadas.
“Hace años que vienen pasando cosas raras y es por la llegada de gente a nuestro Londres que compraron terrenos en la zona de El Shincal, porque supuestamente se respira mejor hay energía y hay sol”, dijo en tono de burla y continuó: “No generalizo. Hay gente que tiene una vida muy tranquila, que están encerraditos y no molestan a nadie. Pero hay otros que están en la calle y no saben qué hacer además de robar. Yo hace más de 10 años que lo vengo diciendo. Entonces algo tiene que cambiar en nuestra sociedad”.
Y enseguida lanzó, “Nuestros baños termales están tomados por los hippies. El otro día había más de 16 hippies ¿y la gente nuestra? ¿Ustedes creen que vienen por la energía nuestra? Que buscan sembrar, póngale, ¿comino? Ya somos grandes, todos sabemos. No quiero generalizar, no son todos, pero por lo que se vio en el procedimiento son muchos”.
Como corolario, el funcionario se despachó incitando: “Es la familia que se tiene que juntar, quien tiene que dar el grito, la voz de que no quieren eso para sus hijos, para sus nietos. Es la familia quien tiene que caminar y decirle en la cara a esta gente y en sus casas que no los queremos en la sociedad de Londres, porque no aportan nada. Lo único que aportan es destruir a nuestros jóvenes, nuestros niños, nuestras mujeres. Eso es lo que tiene que hacer la sociedad de Londres. Porque si voy yo como intendente ellos dicen ‘no me quiere porque no me lavo la cara o porque tengo pelos en la oreja’. Pero si la sociedad se reúne y se organizan las escuelas, el hospital, el juez de Paz y no sólo la policía, es otra cosa. La sociedad se tiene que comprometer para que esto no siga pasando”, concluyó.