De Público, especial para Página/12
El rapero Pablo Hasél atiende a Público desde la prisión Ponent de Lleida. El método es peculiar, por razones obvias. Este periódico entregó una lista de preguntas a sus abogados y el rapero contestó en unas hojas de su puño y letra. Por tanto, no ha habido lugar a la conversación ni a la réplica. Se trata de un mero cuestionario.
Además, el propio Hasél ha pedido en su respuesta que la entrevista se publicara en su integridad y sin edición. Este periódico ha decidido cumplir con su petición, incluyendo una pregunta que contenía un error en su formulación. Tal y como corrige el propio Hasél al entrevistador, Unidas Podemos pidió el indulto y no la amnistía para el ahora preso.
Las respuestas del rapero tienen fecha del 26 de febrero. Se trata de la primera entrevista que Hasél concede desde su entrada en prisión.
¿Cómo está? ¿Cómo es su día a día en prisión?
Estoy fuerte aunque por motivos obvios la cárcel no es un lugar donde poder decir que uno está bien. He pasado una semana en cuarentena encerrado 23 horas en la celda saliendo una hora al día a un patio que literalmente en poco más de diez pasos se recorre. Ahora salgo un poco más, pero sigue siendo el mismo patio porque no me han movido de este módulo al pelear por una celda individual a la que en teoría tenemos derecho y que es una reivindicación histórica con los presos políticos. Paso el día leyendo, haciendo el poco deporte que puede hacerse en un espacio tan reducido, escribiendo y charlando con los pocos presos con los que puedo estar.
¿Qué actividad hace para matar el tiempo? ¿Está componiendo?
Estoy escribiendo un libro de poemas, artículos y cartas. Me inspiro en lo que vivo además de seguir reflejando la realidad de fuera.
¿Ha podido ver las protestas contra su encarcelamiento? ¿Qué le parecen?
He podido seguir algunas protestas y me han emocionado, ha habido una gran respuesta que tiene aún más valor en época de desmovilización. Aprovecharon esta época para encarcelarme creyendo que habría poca respuesta y les ha salido el tiro por la culata. El buen trabajo del movimiento solidario y mi actitud firme han facilitado, pero se han sumado otros factores como el creciente hartazgo por la miseria y represión cada vez más generalizadas. La juventud sin salidas dignas ha sacado la rabia a las calles.
Los medios se han centrado mucho en los disturbios que se han producido en muchas de estas concentraciones. ¿Qué opinión le merece?
Hay mucha hipocresía respecto a la violencia y se oculta la violencia en forma de negación de derechos y libertades fundamentales, que es la que provoca los disturbios. Es simple: sin condiciones de vida tan indignas no habría disturbios; sin represión tampoco.
Los grandes medios del capital criminalizan y condenan la autodefensa pero no condenan las causas que llevan a esa reacción.
En principio usted ha entrado para cumplir una condena de nueve meses de prisión. Sin embargo, ha acumulado nuevas sentencias. ¿Qué perspectiva le trasladan sus abogados? ¿Cree que podrá abandonar la prisión en 9 meses?
Estamos pendientes de si me hacen pagar con prisión la pena-multa de 30.000 euros que la elevaría [la pena] a más de 2 años y de si otras condenas se hacen firmes. Dudo que 'solo' pase nueve meses en prisión y dependerá de la presión de la solidaridad y de que les interese o no que esté preso. Me mentalizo para lo peor porque de un Estado así se puede esperar cualquier cosa.
¿Qué le pareció el manifiesto en su defensa que firmaron artistas como Sabina pidiendo que se frenara su ingreso en prisión?
Es positivo que pesos pesados del mundo del arte y la cultura que tradicionalmente han apoyado o apoyan a este Gobierno hayan pedido mi libertad en defensa de la libertad de expresión. Pone de relieve hasta qué punto genera rechazo las prácticas del régimen. Pero ni así cambian. En todo caso, será sobre todo la lucha en las calles la que pueda arrancar mi libertad. La solidaridad es mucho más que firmar manifiestos.
Algunas de sus declaraciones públicas hacen referencia a una operación de Estado para encarcelarle ya sea en las causas abiertas por enaltecimiento o por las que le condenan por agresión. ¿Por qué cree que el Estado le persigue?
Hay una clara operación de Estado para encarcelarme mucho tiempo y es tan descarada que escandaliza a nivel internacional o a personas que no simpatizan con lo que defiendo. Que el tercer día de mi encarcelamiento me llegara otra condena (pendiente de recurso al Supremo) por un montaje policial sin pruebas, como puede comprobar quien lea la causa entera, lo hace evidente.
Además de tener más causas pendientes como un delito expresión/de odio por increpar al jugador de fútbol nazi Zozulya, por el que me pueden caer hasta 4 años más, o los seis años y medio que me piden por asistir a una manifestación contra la represión en la que pese a no participar en los disturbios y poder probarlo me imputan igual.
Esta operación de Estado se debe a que como reconoció la fiscal: 'Es peligroso porque es conocido e incita a la movilización social'.
A raíz de su ingreso en prisión se ha debatido mucho sobre su persona. ¿Usted se considera una persona violenta o que llame a la violencia?
Como parte de esa operación, los medios que sirven más al Estado han lanzado una campaña para demonizarme con todo tipo de injurias. Eso sí son injurias y no contar hechos objetivos por los que he sido encarcelado. Repudio la violencia con la que nos oprimen y defiendo la autodefensa. Eso no me convierte en violento, todo lo contrario. Amo la paz y esta sólo es posible con justicia. Ahora, si por lucha por la justicia nos agreden, no llamo a quedarse de brazos cruzados porque eso facilita que los verdaderos violentos impongan la barbarie.
¿Las palabras construyen realidad?
Las palabras pueden crear conciencia y esta, lucha. Por eso encarcelan hasta por utilizar las palabras como armas. Son tan cínicos que piden no usar la violencia revolucionaria cuando ni ellos renuncian a la violencia y luego reprimen hasta la lucha pacífica.
Con el debate en las redes sociales también han surgido voces críticas con algunos de sus tuits antiguos. También le han tachado de machista por un tuit suyo de 2012 en el que animaba al bukake contra ciertas mujeres. ¿Se arrepiente de declaraciones como esta?
Dentro del linchamiento para restarme apoyo y pintarme como lo que no soy, han rescatado tuits de hace diez año con expresiones machistas que en broma o no fueron un error que he corregido hace mucho con autocrítica pública y demostrada. Nos han maleducado en el machismo y absolutamente todos hemos dicho expresiones machistas, pero creemos en la reeducación y lo que cuenta es corregirlo.
Ahora hay más sensibilidad al respecto, hace diez años estaba más normalizado. Lo repugnante es que recurren al lejano pasado rectificado para atacarme los fascistas que ya en el presente dicen y hacen cosas muchísimo peores o quienes hablan como si no hubieran cometido errores o no hubiera derecho a corregirlos y mejorar. Me crie escuchando rap de Estados Unidos muy machista y en mi vida lucho contra eso. A falta de argumentos para justificar mi encarcelamiento, medios que difunden el peor machismo, recurren a eso.
¿Por qué se considera un preso político?
Claramente soy un preso político porque estoy en prisión por una lucha política.
Unidas Podemos ha pedido la amnistía para usted y para Valtònyc y el Ministerio de Justicia ha anunciado una reforma de los delitos de opinión. ¿Qué expectativas le generan estos movimientos políticos?
Unidas Podemos ha pedido el indulto que no es lo mismo que la amnistía. Lo ha hecho por la presión en las calles porque esto viene de largo y no hacían nada. ¿Por qué no lo pidieron hace tres años cuando hubieran encarcelado a Valtònyc si no se hubiera exiliado? Porque no hubo esta respuesta. El Código Penal sólo será reformado si la lucha en las calles tiene continuidad. En Francia se han tumbado medidas represivas por meses de lucha más contundente que la de aquí.
Días antes de su entrada en prisión afirmó que había barajado la opción de marcharse al exilio como hizo Valtònyc. Ahora que está dentro, que ha visto tanto las consecuencias de estar encarcelado, ¿cree que tomó la decisión correcta quedándose dentro del Estado?
La respuesta me ha vuelto a mostrar que quedarme fue la opción correcta para la lucha, aunque yo tendría condiciones mucho menos duras en el exilio. El Estado, aunque no se esperara tanta, sabía que habría [respuesta] y por eso me permitía viajar al extranjero porque querían que me exiliara para evitarse jaleo en las calles y escándalo internacional.
¿Le sorprende lo mediático que ha sido su caso una vez se consumó su entrada en prisión en contraste con el relativo poco eco que tuvo su proceso judicial?
No me sorprende que haya sido tan mediático porque una barbaridad como esta escandaliza a todos menos a los fascistas, de ahí que se quieran tapar los motivos de mi presidio. Es más, hasta algunos fascistas lo han visto excesivo.
¿Tiene un proyecto musical a corto plazo? ¿Funcionará alguna especie de autocensura para evitar nuevas condenas?
Sigo escribiendo canciones y no pienso permitir que nos dicten qué escribir, para eso nos reprimen. La libertad de expresión no se defiende con autocensura.
¿Quiere añadir alguna cosa más?
La cloaca de las cloacas representada por Inda y compañía han llegado al punto de utilizar una metáfora mía en la que digo 'La ilusión es una fulana demasiado cara, voy a tener que violarla' ¡para decir que yo llamo a violar a las mujeres!
Es repugnante y gravísimo. Resume la guerra sucia desinformativa para criminalizarme y ellos tienen total impunidad. Si yo hiciera esto con ellos me caerían más años de prisión.