La estrategia argentina de cobrar impuestos a las grandes fortunas para apuntalar la reactivación económica fue analizada en una nota reciente de The Wall Street Journal. En la columna de ese medio clave entre los inversores internacionales se mencionó que “la Argentina intenta gravar y gastar para salir de una crisis económica. Una de las estrategias es cobrar impuestos a los superricos y al próspero sector agrícola”. El tema del impuesto a las grandes fortunas había sido estudiado en otra oportunidad por The Washington Post. Se trata de una fórmula que en muchos países parece cada vez más necesaria por los impactos de la pandemia. The Wall Street Journal no esquivo –más allá del impuesto a las fortunas- su lado conservador en materia económica cuando habló de la economía argentina asegurando que le país tiene políticas intervencionistas prohibiendo los despidos o congelando tarifas. El impuesto a las grandes fortunas se cobrará sobre los individuos con que tengan más de 200 millones de pesos en activos y los plazos para el pago son hasta el 30 de marzo.