Independiente viene corriendo de atrás pero se acerca sigilosamente a los puestos de lucha. Es que el equipo de Ariel Holan, que ayer derrotó 2-0 a Talleres en el estadio Mario Kempes –encuentro pendiente de la 15ta fecha–, suma ahora 31 puntos y tiene todavía un partido pendiente con Defensa y Justicia, correspondiente a la 17ma fecha. La nota de la noche la dieron los jugadores de Talleres y Belgrano, quienes salieron a la cancha juntos a sus pares de Independiente, para decirles a los hinchas “no somos enemigos” y dejar un mensaje de paz luego del asesinato de Emanuel Balbo.

El encuentro arrancó con mucho ritmo, porque así lo planteó Talleres y así quería jugarlo el Rojo. En el intercambio de acciones, los cordobeses parecían estar mejor parados, sin embargo fueron los de Avellaneda los que en una contra letal consiguieron ponerse en ventaja. Tras un tiro libre de Palacios, Benítez limpió de cabeza, Barco corrió por la banda izquierda y metió un centro para Rigoni, que se terminó desviando en el propio Palacios –que retrocedía– y metiéndose dentro del arco de Herrera, que descolocado llegó a cachetear la pelota pero no pudo despejarla.

Pese al gol en contra, Talleres no bajó los brazos y siguió ejecutando su plan. Así llevó a Independiente contra su propio campo y a fuerza de presión y un buen control de pelota en la zona de volantes se fue acercando al arco de Campaña. Sobre el final de la primera etapa, el partido ya no era tan intenso como en los primeros minutos y se achataba.

Por más buenas intenciones que mostraba Talleres, los dirigidos por Holan ampliaron la ventaja a los 57, tras un centro-remate de Rigoni, en el que Herrera dio rebote y ahí no más, en la puerta del área chica, Gigliotti aprovechó su chance para poner el 2-0. Con esa diferencia, al Rojo no le costó mucho controlar el trámite hasta el final. Aunque Campaña tuvo trabajo con los intentos fallidos de Talleres para descontar.