El volcán San Cristóbal, el más alto de Nicaragua y situado en el “cordón de fuego” del Pacífico, registró este martes cinco explosiones y una emanación de gases y cenizas que afectan a varias localidades aledañas. Hasta el momento, no se reportaron víctimas ni daños materiales.

Las explosiones, de baja a moderada intensidad, se registraron en la tarde y la más fuerte ocurrió a las 13.25 (hora local), la cual elevó las cenizas a una altura aproximada de 800 metros sobre el cráter, indicó el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter) en un informe.

“Por efecto del viento, se transportó una capa de cenizas, cayendo de aproximadamente unos dos milímetros en las ciudades de El Viejo, Chinandega y Chichigalpa”, en el noroeste de Nicaragua, “depositándose también cenizas en las comunidades ubicadas en esa dirección (Las Grecias, La Mora 1, 2, 3, la Bolsa)”, precisó el Ineter.

A su vez, señaló que en los momentos de las explosiones la amplitud sísmica en tiempo real (RSAM) alcanzó un valor máximo de 528 unidades. Actualmente, la RSAM oscila entre las 90 y 130 unidades.

“Por el momento, esta actividad es de baja energía, y es probable que ocurran en las próximas horas o días nuevas explosiones con tendencia a ser más bajas que las anteriores, y sin representar mayor peligro para la población”, pronosticó el Ineter.

Por su parte, las autoridades nicaragüenses recomendaron a la población que trate de no salir de sus hogares hasta que la nube de cenizas se disipe, utilizar barbijos preferencialmente húmedos para evitar afecciones respiratorias, y tapar los depósitos de agua. 

Además, sugirieron que una vez que la nube de cenizas desaparezca, se trate de limpiar los techos de las casas para evitar la acumulación de este material.

El Ineter concluyó que está realizando un seguimiento cercano a la actividad volcánica y que “estará informado a nuestra población de forma oportuna”.

El volcán San Cristóbal posee una altura de 1.745 metros sobre el nivel del mar y se encuentra en la provincia de Chinandega, en el noroeste de Nicaragua, y forma parte de la cadena volcánica de este país.