“Nuestra economía va a crecer liderada por las inversiones y las exportaciones”, aseguró el titular del Palacio de Hacienda, Nicolás Dujovne, durante un encuentro organizado por el Council of Americas en Washington DC. A 362 kilómetros de distancia, en otro evento convocado por la misma organización en Nueva York, el ministro de Finanzas, Luis Caputo, reforzó esa visión. “Vemos mucho interés por las inversiones, muchas ya están realizándose, es un proceso que ya empezó y se va a consolidar a lo largo de los años”, aseguró al presentar su propia versión sobre la “lluvia de inversiones”. La información oficial evidencia que, después de un año de parálisis, la inversión pública comenzó una incipiente reactivación concentrada en las obras viales, mientras que el estancamiento del mercado interno y la política de altas tasas del Banco Central atentan contra los desembolsos del sector privado.
“Nuestro país viene de un gobierno con una economía absolutamente cerrada, con un muy elevado déficit fiscal, una inflación descontrolada y tarifas de servicios que se encontraban muy lejos del equilibrio”, consideró Dujovne, omitiendo señalar que los aumentos de precios y el déficit fiscal se encuentran en la actualidad por encima de los heredados. “Desde agosto del año pasado, el empleo formal en la Argentina ha vuelto a crecer de manera sostenida, a un ritmo cercano a los 20 mil puestos de trabajo por mes”, consideró el responsable de Hacienda, mientras el Indec informó ayer que durante 2016 el empleo formal retrocedió 1 por ciento, equivalente a la destrucción de 68.314 puestos de trabajo.
“El programa de infraestructura que estamos llevando a cabo es muy ambicioso: ferrocarriles, rutas, petróleo, energías renovables, entre otras áreas”, aseguró ayer Caputo, que viajó a Estados Unidos para participar de las reuniones del FMI y el Banco Mundial. Con más de 15.000 millones de nueva deuda emitida en moneda extranjera en lo que va del año y cerca de 80.000 millones desde que asumió el gobierno de Mauricio Macri, el funcionario consideró que “ya hemos cubierto el 70 por ciento de las necesidades financieras para este año”. El titular de la cartera de Finanzas y su equipo también se reunieron con los principales bancos de Wall Street. “La sociedad argentina apoya el proceso de cambio que estamos llevando adelante”, aseguró Caputo.
El lunes, el FMI puso en duda la capacidad del gobierno para cumplir con la meta de inflación autoimpuesta por el Banco Central. En su informe sobre las perspectivas de la economía mundial publicado el lunes, el organismo internacional anticipó una inflación para este año del 21,6 por ciento, por encima del techo del 17 por ciento que pretende alcanzar Federico Sturzenegger. “Incrementamos nuestra perspectiva de inflación con respecto a la anterior previsión, principalmente, porque los precios parecen ser más inflexibles a la baja de lo que creímos meses atrás, pero no hemos modificado sustancialmente nuestros supuestos para adelante”, consideró Roberto Cardarelli, el economista del Fondo que lideró la misión que visitó el país el año pasado, durante una entrevista con el diario El Cronista.
Las autoridades argentinas estiman un 12 por ciento de inflación en 2018 mientras que el Fondo, un organismo que no suele acertar en sus proyecciones, espera un 17,2 por ciento.