Las naftas y el gasoil volverían a aumentar el próximo viernes por la actualización trimestral del Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) y el Impuesto al Dióxido de Carbono (IDC). Además, las petroleras podrían aprovechar para trasladar al surtidor el incremento que se aplicó en el precio de los biocombustibles el 1 de marzo. Los estacioneros estiman que el ajuste podría oscilar entre 2,5 y 3 por ciento según la región, sin contemplar ningún tipo de recomposición por la suba que viene registrando el crudo en las últimas semanas.
El ajuste del ICL y el IDC, correspondiente a la actualización del cuarto trimestre calendario de 2020, debía regir a partir del 1 de marzo. Sin embargo, el 25 de enero el gobierno publicó el decreto 35/21 que postergó ese ajuste por 12 días. Si no hay una nueva postergación, ese incremento comenzaría a regir este viernes.
A su vez, el 1 de marzo el precio del biodiesel subió otro 3,6 por ciento (de 86.875 a 89.975 pesos la tonelada) y el bioetanol un 1,9 por ciento (47.800 a 48.700 pesos), pero YPF no trasladó ese ajuste al surtidor y el resto de las petroleras solo avanza si YPF lo hace. Por lo tanto, en el sector especulan con la posibilidad de que hayan esperado hasta este viernes para aplicar el aumento junto con el ajuste impositivo y no pagar el costo política de subir los precios dos veces seguidas en menos de 15 días.
Las petroleras reclaman además que las dejen trasladar al surtidor el impacto de la fuerte inflación que se viene registrando, en torno al 4 por ciento mensual, y del precio del crudo que en lo que va del año trepó de 51,80 a 62,20 dólares (31,6 por ciento). Sin embargo, el gobierno, que controla el mercado a través de YPF, todavía no autorizó que las empresas avancen con una recomposición del margen empresario.
El año pasado el gobierno mantuvo los precios congelados hasta el mes de agosto, pero desde entonces le dio luz verde a una seguidilla de subas. En la Ciudad de Buenos Aires, YPF aumentó en los últimos siete meses 39,2 por ciento el precio de la nafta Premium y 39,8 por ciento el precio de la nafta súper. En el caso del gasoil, la suba del Premium fue de 40,1 por ciento, mientras que la variedad común trepó 40,6 por ciento.