Ayer por la noche, el Gobierno nacional prorrogó la emergencia sanitaria hasta el próximo 31 de diciembre, a través del decreto 167, publicado hoy en el Boletín Oficial. En una reunión que tuvo lugar ayer en Casa Rosada, se definieron nuevas restricciones que se ven reflejadas en este decreto. El Gobierno reducirá los vuelos a distintos países para evitar el ingreso de nuevas cepas de coronavirus y extremará los controles de aquellas personas que deban viajar para que cumplan la cuarentena estricta de siete días. El encuentro de ayer se dio entre funcionarios del ministerio del Interior, la ministra de Salud, Carla Vizzotti, el ministro de Turismo y Deportes, Matías Lammens, y la directora nacional de Migraciones, Florencia Carignano. Vizzotti comentó entonces su preocupación por el aumento de casos en países limítrofes y las nuevas cepas que circulan en el mundo.
Se restringirán los vuelos a los países que se detectaron más afectados por las nuevas cepas del virus. Brasil, Estados Unidos, Colombia y Chile, más algunos países de Europa, figurarían entre ellos. "Vamos a volver a recomendarse a todo el mundo que no viaje si no es esencial, si no necesita hacerlo por trabajo o por salud", adelantaron desde Gobierno. Además explicaron que "cuando esas personas vuelvan tendrán que hacer sí o sí los siete días de cuarentena y se va a denunciar penalmente a las personas que falsifiquen los test PCR obligatorios para ingresar al país".
La prórroga de la emergencia habilita al Ministerio de Salud, de acuerdo a la evolución de la situación epidemiológica, a que recomiende la suspensión o reducción de frecuencias de servicios de transporte internacional de pasajeros aéreo, marítimo, fluvial y terrestre, así como la suspensión de destinos.
"Efectivamente habrá una reducción de los vuelos que ya existían a varios lugares por los que el ministerio de Salud está preocupado. Sobre todo Brasil", explicó Carignanio en diálogo con la 750. "No vamos a eliminar rutas, ni realizar cierre de fronteras, pero tendremos mayores cuidados para el ingreso de argentinos", especificó la directora de Migraciones.
Con respecto a la responsabilidad ciudadana, Carignano comentó que por más que el Gobierno está recomendando que las personas no viajen al exterior si no es por fuerza mayor, los argentinos viajan igual y, en muchos casos, no realizan la cuarentena obligatoria e incluso algunos hasta falsifican las pruebas PCR. "Estamos pidiendo por favor que no viajen a países donde hay distintas cepas y, si aún así deciden hacerlo, tendrán que hacer la cuarentena correspondiente".
Con respecto a los PCR falsos, Carignano subrayó que "hemos realizado denuncias penales y tendrán que responder. Si uno no se quiere cuidar, está bien, pero tiene que entender que está ingresando una cepa nueva al país que no tiene circulación comunitaria". En esa línea, indicó que la ministra de Salud pidió a sus pares en las distintas provincias un mayor control de la cuarentena posterior a los viajes al exterior.
"Muchas personas ingresaron con un PCR negativo al país y sin embargo a los cinco días se les detectó el virus, por eso es importante que hagan cuarentena para chequear que no tengan en su cuerpo una cepa nueva y la ingresen al país", indicó la directora de migraciones. La cartera que conduce Vizzotti está en alerta ya que en Brasil hay en este momento más de 7500 argentinos que deberán ser muy controlados a su regreso.
Carignano informó que el Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, quiere que haya un control estricto de quienes regresen y que, si bien en estos momentos los controles por parte de las fuerzas federales son aleatorios, ahora se va a solicitar que las provincias controlen a que las personas realicen las cuarentenas correspondientes. "La policía llegará a la casa de quien haya viajado y controlará que esté cumpliendo con el aislamiento, como sucedía al principio", expresó.