El Colectivo de Mujeres por la Memoria Étnica del departamento de San Martín, al norte de Salta, realizará hoy la presentación del libro Gritos de las madres del monte. Voces de mujeres en lucha. Se trata de la tercera edición de un trabajo de investigación que llevan adelante 10 integrantes de los Pueblos Wichí, Guaraní y Weenhayek, desde hace más de 20 años.
"Gritos de la madre del monte", reúne relatos y experiencias de mujeres y trans de pueblos originarios de Tartagal, congregadas con el propósito de proteger el monte nativo y la vida que habita en él. Es por eso que a lo largo de tres capítulos se profundizará en la historia propia del monte, en las denuncias por los constantes atropellos al territorio y en el lazo espiritual que está presente por el sólo hecho de habitarlo.
La comunicadora Edith Martearena, de la radio comunitaria La Voz Indígena y la organización de Mujeres Originarias Aretede, contó ante Salta/12 que este nuevo libro invita a "seguir pensando la historia y la memoria" de las comunidades del lugar. El trabajo del colectivo se viene desarrollando desde los inicios del año 2000 gracias al Taller por la memoria de los pueblos. "De ahí que cada una nos desempeñamos como investigadoras de la memoria", expresó Martearena.
Además del trabajo que logra plasmarse en papel, el espacio del taller permite que las mujeres de los distintos pueblos puedan escucharse y "recuperar la voz de este sector que prácticamente ha sido silenciado", afirmó. La presentación del libro se realizará hoy a las 18:30, en las instalaciones de la radio comunitaria, ubicada en la calle San Martín 1090.
Todo el trabajo previo a la publicación, se realizó durante el año pasado debido a la pandemia. Al estar "parados" en la radio comunitaria, retomaron el trabajo que venían realizando desde la organización Aretede junto a las capacitaciones a referentas de las comunidades del departamento de San Martín.
Martearena expresó que la creación del libro, y lo que allí se cuenta, viene a romper con el discurso que señala que las mujeres "solamente estamos en la casa y somos para la casa". Aseguró que la lucha por el territorio indígena también es una lucha de las mujeres, incluso, "muchas han sido muy dolorosas".
"Queríamos mostrar a través de este libro, que también sufrimos cada vez que vamos al monte buscando la materia prima y nos terminamos topando con que ese monte ya no está para nosotros", manifestó. Con la escritura, aseguró que se viene "imponiendo" que las mujeres acompañan la lucha por los territorios.
Anteriormente ya se había publicado Lunas, tigres y eclipses, (2003) y El anuncio de los pájaros, (2005). Desde sus inicios, el colectivo de mujeres sostiene la indagación de la memoria indígena. "Son 20 años de estar en pie", destacó la antropóloga e integrante de Aretede, Leda Kantor.
Señalo que es fundamental la memoria, no sólo para reconstruir el pasado, sino para pensar en los elementos que ya no están y ser conscientes de la situación que se vive hoy. Esto en referencia al "proceso de avasallamiento que termina en la ruptura cultural y que significa una destrucción grande" hacia los pueblos indígenas. El libro termina desembocando en ello y en cómo se dio ese proceso de despojo.
Martearena dijo que la importancia de continuar con las publicaciones, pero sobre todo, con el mismo taller permite transmitir las historias de los pueblos y de las organizaciones que están allí presentes.
La historia entre ese pasado y la actualidad, lleva a que hoy "estemos culturalizados e interferidos por otras culturas", dijo la comunicadora. Es por eso, que renace con mayor fuerza el sentimiento de lucha por el territorio y en donde ello "sigue intacto" por la relación entre el pueblo y el monte, consideró.
La historia en tres
Kantor, quien colaboró en la producción del libro, explicó que se indagará sobre tres temas (capítulos) que atraviesan a las mujeres: los recuerdos del monte, los procesos de desmontes y las formas espirituales de protección que tiene el territorio.
El primero, contará las memorias en relación al monte y a la cultura, mayormente vinculadas a las formas productivas, como la caza, la recolección y la producción agrícola. En el libro se pregunta cómo era ese tiempo en que no se había dado el proceso de ruptura que inició con el despojo territorial hacia las comunidades indígenas del lugar.
El segundo, cuestiona qué es lo que pasa con el proceso de desmonte al momento que se da la compra y venta de las tierras, la ruptura de los pueblos y el crecimiento acelerado de la frontera agropecuaria. "A partir de ahí, se dan los desalojos y toda la violencia hacia los pueblos ante el avasallamiento territorial, que aún sigue estando en la zona del monte", agregó la antropóloga.
El tercer, y último capítulo, habla de las formas espirituales de protección de los montes nativos. Los pueblos originarios sostienen que el monte guarda formas de protección propias, y que se pueden ver en quienes realizan acciones en su contra, como la caza indebida y el desmonte. "A quien daña la naturaleza, le suceden cosas", indicó Kantor.
El trabajo es de autoría colectiva, ya que fueron 10 las mujeres que participaron en todo el proceso. Ellas son: Felisa Mendoza, Nancy Lopes, Cristina López, Mónica Arias, Aida Valdéz, Mónica Medina, Yoselin Plaza, Teresa Torre, Edith Martearena y María Miranda. Del proceso también colaboraron Mariana Ortega, Andrea Fernández y Sebastián Gómez.
La antropóloga contó que todo el trabajo se realizó mediante entrevistas personales y grupales, que permitió "hacer un proceso de reflexión y análisis de lo que es ese pasado histórico y este presente". Además de la existencia de Aretede, también está la radio comunitaria, que les permite a las mujeres plasmar las historias a través de ella. En la actualidad, la radio está dirigida por representantes de los Pueblos Guaraní, Wichí y Toba.