El tribunal integrado por los jueces Pablo Pinto, Ismael Manfrín y María Isabel Más Varela condenó a Fernando Javier More a prisión perpetua por considerarlo autor del femicidio de su entonces pareja Érica Natalia Moruzze, de 28 años, en la vivienda que compartían en Liniers al 3000. La víctima cumplía prisión domiliciaria luego de haber sido condenada a 10 años de prisión por homicidio en ocasión de robo. La noche del 30 de mayo de 2014 More la golpeó y estranguló hasta causarle la muerte por asfixia. La fiscal Mariana Prunotto pidió la condena a perpetua después de comprobar que era falsa la versión de que Érica había querido suicidarse y que More sostuvo desde un comienzo. Por esta razón llegó a juicio en libertad, aunque al iniciar el debate quedó detenido por pedido de la fiscal debido a la magnitud de la pena que debería cumplir en caso de ser condenado. La fiscal señaló que el Estado también falló en la custodia de la víctima a la que se le otorgó domiciliaria para que diera a luz. Ya había denuncias por violencia y la relación se daba en un contexto de dominación y adicciones.