El ataque a balazos contra el abogado Ariel González Zevallos, ocurrido el pasado sábado en la estación de servicio Axion, de la zona norte "podría estar vinculado a un problema previo de la víctima". Al menos, esa es una de las líneas investigativas más firmes que sigue la fiscal Marisol Fabbro, quien conduce la investigación. La funcionaria judicial remarcó que si bien no se descarta por ahora ninguna hipótesis, en el vehículo de la víctima fueron encontrados poco más de 100.000 pesos, por lo cual, a prima facie, se descartaría la teoría del robo. Fabbro también hizo un repaso de las investigaciones que quedaron en sus manos y contó que "el 75 por ciento de los hechos que son notificados a la Fiscalía de Homicidios Dolosos están vinculados al narcomenudeo". 

La fiscal realto minuciosamente que el sábado a las 19.30 Ariel González Zevallos fue atacado a tiros en la estación de servicios Axion ubicado en Boedo y Baigorria. Se trata de un abogado penalista que quedó vinculado en 2009 a la faz económica de la causa de la efedrina – que tuvo como protagonista a Mario Roberto Segovia – y prestó servicios profesionales a algunas personas vinculadas a la banda de los Monos como los hermanos Ezequiel “Parásito” y José Horacio “Grasita” Fernández, asesinados junto a Gerardo Abuelo Abregú en abril de 2018 en Granadero Baigorria cuando se encontraban arriba de un Chevrolet Corsa.

La fiscal detalló a la prensa la secuencia que tanto pánico y relató que la víctima ingresó a la estación de servicios en su Mercedez Benz color negro y segundos después arribaron los atacantes, que ingresaron por Baigorria, en una moto de alta cilindrada color blanco con detalles rojos. "Estaba terminando de estacionar y no pudo abrir la puerta. El que iba como acompañante empezó a disparar del lado del conductor".

Si bien Fabbro no pudo especificar si los sicarios venían siguiendo al vehículo, porque aún espera las imágenes de todas las cámaras de seguridad de la zona, señaló que sí pudo acceder a lo filmado por el sistema de seguridad del surtidor. "En el video se ve como, en un momento, dispara sobre el abogado, pero se le traba el arma. Entonces abrió la puerta y efectuó dos disparos más".

Fabbro detalló también que aún no se pudo acceder al teléfono de la víctima porque se desbloquea con la huella digital. "Hoy ( por ayer) vamos a pedir la autorización a la familia y al nosocomio en el que está internado para poder hacer el desbloqueo y sacar la información. Lo que sí sabemos es que logró enviar un mensaje a una mujer que tiene su comercio cerca del lugar diciéndole que lo habían baleado y que lo vaya a ayudar".

En ese sentido, la fiscal explicó que más allá de ese mensaje, el letrado no pudo declarar nada porque su estado de salud es muy reservado. "Está en coma inducido porque los médicos tuvieron que someterlo a asistencia respiratoria mecánica”.

Los investigadores secuestraron 18 vainas servidas, calibre 9 milímetros, y dos plomos deformados y los peritos establecieron que el vehículo tenía 9 impactos, siete en el vidrio y dos en la puerta.

En cuanto al móvil, la fiscal remarcó que «a menos de 48 horas del hecho no se pueden descartar hipótesis. Sin embargo, considerando que dentro del vehículo se encontraron más de 100.000 pesos y por la mecánica del ataque, Fabbro arriesgo que "puede que haya sido un problema previo de la víctima y que el ataque haya sido en función de eso".

La fisal Fabbro también otros tres hechos de sangre en distintos puntos de la ciudad. Cerca de las 14 del viernes un hombre con una moto llegó a su casa ubicada en Cullen y Ugarte acompañado de un adolescente. Desde un auto gris y una moto los balearon. El conductor identificado como  Francisco Antonio Olivera, de 22 años, falleció y el adolescente de 14 años resultó herido en las extremidades. En el lugar se encontraron 9 vainas calibre 9 milímetros y la fiscal estima que los disparos estaban destinados a la víctima que resultó muerta. Pidió relevamiento de cámaras y se están tomando testimonio. Los agresores aún no fueron identificados.

Horas después en la zona de Cullen y pasaje Lejarza balearon a cuatro personas que estaban en un quiosco. La fiscal dijo que aparentemente las víctimas no tienen nada que ver con el móvil del ataque y no descarta una vinculación con el hecho ocurrido en Cullen y Ugarte. Tres de las víctimas volvían de jugar al fútbol y se detuvieron en el quiosco a tomar algo y el restante era un cliente ocasional. Dispararon desde una moto y en el lugar se encontraron 17 vainas calibre 9 milímetros. Una de las víctimas falleció y el resto se encuentra fuera de peligro.

Finalmente a las 20.30 del viernes en un pasillo ubicado en Cerrillos al 3600 desde una moto acribillaron a cuatro personas, tres de ellas murieron. Se trata del boxeador  Brian “La Cobra” Zarza Lucas Luján y Esteban Benítez. También resultó herido de gravedad Miguel Ángel Alcaraz, de 41. La fiscal hizo referencia a que este caso está vinculado al narcomenudeo. La funcionaria dijo que se dio intervención al juzgado federal porque se determinó que había material estupefaciente en el piso junto a las víctimas y que se estableció que había una vivienda que podría funcionar como un búnker que en el momento del arribo policial estaba cerrada y sin habitantes.