Luego de la multitudinaria manifestación de ayer contra el presidente Nicolás Maduro –replicada por el oficialismo con una masiva concentración-, la oposición venezolana volvió a movilizarse hoy en Caracas. Los manifestantes opositores intentaron llegar a la autopista Francisco Fajardo desde la cercana plaza Brión, en el municipio residencial de Chacao, pero apenas se acercaron al cordón de seguridad recibieron una andanada de gases lacrimógenos.
Nuevamente el objetivo de la marcha era llegar a la Defensoría del Pueblo para entregar un documento con planteamientos a favor de la "restitución del orden constitucional" y para exigir la remoción de los jueces del Tribunal Supremo de Justicia que emitieron un fallo –ya revocado- por el que asumieron las funciones del Parlamento. El Gobierno volvió a advertir que las marchas opositoras no contaban con autorización para llegar al municipio Libertador, en el centro de la ciudad.
La marcha de hoy estuvo encabezada por el líder opositor Henrique Capriles, acompañado por el jefe legislativo Julio Borges y otros diputados, que apenas pudieron avanzar unos metros hacia la entrada de la autopista. Agentes antimotines también lanzaron bombas lacrimógenas para dispersar pequeñas concentraciones en el oeste caraqueño y se registraron breves enfrentamientos en los sectores de Santa Mónica y El Paraíso.
La movilización opositora se dio tras la jornada de masivas marchas y contramarchas vivida ayer en todo el país, marcada por la muerte de tres personas. En Caracas murió por un disparo un adolescente de 17 años, cuya familia negó que estuviera participando en las protestas. Desde el Gobierno afirman que fue baleado en un hecho delictivo cerca de una marcha antichavista y que están en curso las investigaciones.
En tanto, en la ciudad de San Cristóbal, fronteriza con Colombia, falleció también por un disparo en la cabeza una joven de 23 años. El ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Néstor Reverol, informó que por el crimen de la joven fue detenido Iván Alexis Pernía Dávila, un militante del partido Vente Venezuela que dirige la opositora María Corina Machacho. La oposición había acusado a los llamados "colectivos" chavistas por el asesinato.
Además, durante la jornada de movilizaciones fue asesinado un militar en las afueras de Caracas, crimen que el Gobierno adjudicó a francotiradores contratados por la oposición.
Durante su discurso de ayer ante la concentración oficialista, el presidente Nicolás Maduro responsabilizó por la violencia y por lo que consideró un intento de golpe de Estado a Julio Borges, presidente de la Asamblea Nacional de mayoría opositora. “Julio Borges, eres el jefe del golpe de Estado, después no te quejes cuando llegue la justicia; te lo estoy diciendo con tiempo, estoy decidido a defender la patria y no voy a retroceder ni un milímetro; lo que voy es pa’ lante, carajo”, dijo el mandatario.
Maduro aseguró que desea ir pronto a elecciones -uno de los reclamos de la oposición- para ganar definitivamente lo que llamó una batalla contra su Gobierno. “Tenemos que buscar fórmulas para ganar definitivamente esta batalla en paz, yo quiero ganar esta batalla ya. Yo quiero que nos preparemos para tener una batalla electoral pronta y total”, manifestó el jefe de Estado.
Las elecciones de gobernadores debieron realizarse en 2016, pero fueron suspendidas y aún no tienen fecha, las de alcaldes están pautadas para este año y las presidenciales para diciembre de 2018.
