La agencia espacial estadounidense NASA y la compañía SpaceX firmaron un acuerdo de seguridad con el objetivo de evitar las colisiones entre sus naves y cohetes, respectivamente.

Steve Jurczyk, administrador interino de la NASA, explicó este jueves en un comunicado que a raíz del incremento de satélites a cargo de empresas comerciales como SpaceX “es fundamental que aumentemos las comunicaciones, intercambiemos datos y establezcamos las mejores prácticas para garantizar que todos mantengamos un entorno espacial seguro”.

En este sentido, la agencia espacial señaló que el acuerdo busca “evitar colisiones de lanzamiento entre las naves espaciales de la NASA y la gran constelación de satélites SpaceX Starlink, así como las misiones de viaje compartido relacionadas”.

Asimismo, se propone eludir “la conjunción”, que se produce cuando hay “una aproximación cercana entre dos objetos en el espacio, generalmente a una velocidad muy alta”.

SpaceX, por su parte, tiene como objetivo brindar internet de alta velocidad, constante y “asequible” a usuarios de cualquier lugar del mundo a través del envío masivo de satélites de la red Starlink, los cuales operarán en una órbita baja y permitirán una mejor conexión y servicio.

En tanto, Jurczyk destacó que la nueva sociedad de NASA y SpaceX “depende de las capacidades basadas en el espacio para las comunicaciones globales, la navegación, el pronóstico del tiempo y mucho más”.

Siguiendo esta línea, el acuerdo da luz verde a un “nivel más profundo” de coordinación, cooperación e intercambio de datos, así como también define la disposición, las responsabilidades y los procedimientos para la coordinación de la seguridad de vuelo.

La agencia espacial resaltó a su vez que tanto la NASA como SpaceX se benefician de esta interacción mejorada al garantizar que todas las partes involucradas puedan conocer la ubicación exacta de las naves espaciales y los escombros en órbita.

SpaceX acordó que sus satélites Starlink maniobrarán de forma autónoma o manual para garantizar que las misiones de los satélites científicos de la NASA y otros activos puedan operar ininterrumpidamente desde una perspectiva de prevención de colisiones.

Las naves espaciales Starlink están equipadas con receptores de servicios satelitales de navegación global, que calculan los parámetros orbitales. Además, poseen un sistema de propulsión de iones y una capacidad de maniobra autónoma que proporciona datos para un intercambio de información rápido y proactivo.