La policía bonaerense y funcionarios de alto rango del Ministerio de Seguridad provincial serán sometidos a exámenes toxicológicos para detectar el consumo de drogas ilegales y alcohol como parte de una campaña de prevención del consumo al interior de las fuerza policial. Los análisis, que comenzarán dentro de 60 días, luego de una campaña preventiva, se realizarán de forma sorpresiva y aleatorias para los 93.000 oficiales, aunque no será así para los primeros testeados: el ministro de Seguridad, Cristian Ritondo, los subsecretarios y el jefe de la fuerza, Pablo Bressi.
Ayer, la gobernadora María Eugenia Vidal lanzó el programa “Política de prevención y control del consumo de sustancias psicoactivas en el ámbito de la Policía”, durante una conferencia de prensa en la Casa de Gobierno, en la Plata. Escoltada por Ritondo y el presidente de la fundación Fundartox, Carlos Damín, que será la encargada de llevar adelante los controles, la mandataria aseguró: “Sabemos que quien consume no puede manejar un patrullero, no puede manejar un arma y no puede perseguir el narcotráfico. También vamos a darles la oportunidad a muchos policías que sufren esta enfermedad a que pidan ayuda para que no la atraviesen solos. Pero mientras hacen su tratamiento y se recuperan, no pueden formar parte de las fuerzas”, señaló.
Damín, quien también es jefe de Toxicología del Hospital Fernández, explicó a PáginaI12 que “la fundación firmó un convenio por dos años con el Ministerio de Seguridad (bonaerense) para implementar una política de prevención, no es sólo un control. Durante los primeros 60 días se va a realizar una campaña de prevención de la salud. De esta forma, quienes consuman van a tener tiempo de pedir ayuda y realizar un tratamiento”.
El toxicólogo dijo que “la idea no es cazar consumidores sino detectarlos para poder ayudarlos. No va a ser punitivo sino que quien sea detectado positivo será derivado a tratamiento. Esto se hace en muchas empresas, como las aéreas, marítimas, de transporte, en el futbol mismo”, y remarcó que “lo que tenemos que asegurarnos es que quien maneja un patrullero, está armado y tiene la responsabilidad de cuidar a la gente, no esté bajo el consumo de sustancias. Esto hay que resaltarlo, no es un simple control sino una política que finaliza con un control”.
El especialista detalló que los controles van a ser aleatorios, a través de sorteo, con testigos, y se asegurará la confidencialidad. Damín explicó que “aún falta determinar si los estudios para detectar el consumo de drogas serán a través de análisis de orina o de saliva, mientras que los de alcohol serán por alcoholímetro”.
En cuanto a por qué el ministerio eligió una fundación, en lugar de un organismo estatal, el presidente de Fundartox evaluó que “tal vez quisieron asegurarse de que no haya vinculación con el Estado para evitar suspicacias”, y aclaró que “nosotros somos una fundación sin fines de lucro, no una empresa privada. Es un acuerdo como tantos otros que existen en el Estado, como los de la Fundación Huésped y tantas otras”.
Damín avisó que hoy “empieza la campaña interna para los 93.000 policías. Va a durar 60 días y no va a cesar en los próximos dos años”.
Durante el anuncio, la gobernadora ligó la iniciativa sanitaria a la lucha contra el tráfico de drogas y la corrupción policial, y sostuvo que la preocupación “de todos los vecinos de la provincia es poder vivir en paz y más seguros. Y para que esto se logre es muy importante poder avanzar en la pelea contra el narcotráfico y que venimos dando desde hace casi un año y medio y en la que no vamos a parar”. Y dispuso la obligatoriedad de presentar la declaración jurada de bienes a otros siete mil policías, que incorpora dos grados –los oficiales inspectores y los principales– a los 6 mil agentes de alto rango para los que ya era exigible, “porque los policías tienen que explicar a la gente cómo viven y de qué viven”.