El camino hacia la segunda vuelta en Ecuador se aceleró este domingo con un encendido debate presidencial entre el candidato del correísmo, Andrés Arauz, y el banquero Guillermo Lasso. El evento celebrado en Guayaquil, de carácter obligatorio, giró en torno a una economía devastada por los efectos de la pandemia de coronavirus, y en medio del escándalo del llamado Vacunagold que ya le costó el cargo al ministro de Salud Rodolfo Farfán. 

En líneas generales, Arauz planteó levantar la economía del país a partir de una política de subsidios a los sectores más perjudicados poniendo como prioridad la industria nacional. Del otro lado Lasso propuso abrir la economía al mundo y garantizar la estabilidad del dólar. A diferencia del debate anterior, en esta ocasión los aspirantes a la presidencia pudieron hacerse preguntas entre sí. A Lasso se lo notó mucho más tenso que Arauz, y más de una vez habló más allá del tiempo estipulado. El primero no se cansó de equiparar a Arauz con Rafael Correa, mientras que el segundo hizo lo mismo al considerarlo una pieza central del gobierno de Lenin Moreno. Este segundo debate presidencial puede ser clave para que millones de ecuatorianos que no votaron por Arauz ni por Lasso en primera vuelta definan su postura.

Los simpatizantes de los dos candidatos a la presidencia le aportaron color a la jornada al acercarse a los estudios de TC Televisión en Guayaquil. Alrededor de 200 policías con uniformes antidisturbios se colocaron a una cuadra del canal para impedir que se crucen ambas facciones. El azar del sorteo quiso que Lasso se siente a la derecha de la pantalla, y Arauz a la izquierda. 

"No tenemos tiempo que perder", fue lo primero que dijo Arauz. "Más allá de las diferencias tenemos que trabajar juntos y unidos para transformar el Ecuador", destacó sonriente a diferencia de Lasso, a quien desde un principio se lo notó más frío y distante. "Nací en el seno de una familia de clase media y desde pequeño aprendí que con el trabajo honrado y esforzado se puede prosperar", aseguró el banquero de Guayaquil, quien llamó a construir un "proyecto de desarrollo en libertad".

Arauz destacó las medidas fundamentales de su plan de reactivación económica ("producción, trabajo y liquidez") y aseguró: "No necesitan indicadores para saber como la están pasando los ecuatorianos. Vamos a poner dólares en los bolsillos de las familias". Enseguida vino la réplica de Lasso. "Propone una cuarentena de dólares en Ecuador. ¿Serían dólares o sería humo en los bolsillos de los ecuatorianos?", disparó. 

Arauz respondió que planea que los dólares "se queden en Ecuador fomentando la produccion y generando trabajo". El candidato del correísmo tomó un dólar entre sus manos para sugerir: "Jamás permitiremos que nos lo quieran quitar los banqueros. Queremos impulsar la economía en nuestra patria, no en cuentas offshore en Panamá o en Bahamas".

Lasso por su parte aseguró que también le preocupa "la economía de la familia ecuatoriana". A diferencia de Arauz, Lasso leía cada una de sus palabras. "Ustedes prometieron el milagro ecuatoriano y nos han entregado un desastre", aseguró antes de recordar que el dólar "va a ser la moneda de libre circulación en el Ecuador".

Arauz aprovechó sus treinta minutos de réplica para consultar: "Si tuviera en una mano el beneficio del Ecuador y en la otra el beneficio de su banco, ¿a quién beneficiaria?". Lasso llamativamente eludió la respuesta y se refirió a "la dureza de la pandemia" para proponer créditos a los ecuatorianos, rehabilitación de escuelas y reactivación de la economía rural.

"Más banano en el mundo es más empleo. Ecuador debe estar en la Alianza del Pacífico", aseguró Lasso en la única referencia al comercio internacional a lo largo del debate. El candidato de la alianza entre CREO y el Partido Social Cristiano enfatizó que eliminará progresivamente el impuesto a la salida de divisas implementado en 2007 bajo el gobierno de Rafael Correa.

En materia de salud, Lasso planteó que en los primeros 100 días de gobierno va a vacunar a al menos nueve millones de ecuatorianos. "Vamos a negociar vacunas con varios proveedores, vacunas reales, no ofertas falsas de que Argentina nos donaría 4 millones de vacunas, Andrés". 

El candidato del progresismo ecuatoriano dedicó unas palabras a la lista de vacunados vip que se destapó en los últimos días: "Tienen en común que son amigos del señor Lasso. Por eso proponemos una vacunación universal y gratuita", destacó, al tiempo que recordó que "la salud es un derecho y no un privilegio de pocos".