El equipo económico consiguió en los últimos meses bajar fuertemente la brecha cambiaria. Desde los picos de 120 por ciento anotados a finales de octubre retrocedió a menos del 60 por ciento en los primeros meses de este año. Este resultado se acompañó de otra tendencia clave: la fuerte caída de expectativas de devaluación del dólar oficial.
En informes del mercado se destaca que los inversores empezaron a desprenderse en las últimas semanas de los bonos dólar linked. Es decir los títulos públicos que se colocan en pesos, se pagan en pesos pero ajustan en función del tipo de cambio mayorista.
La explicación de las ventas de estos títulos es que no se proyecta una devaluación fuerte en el corto plazo y, por lo tanto, los inversores evalúan que no es conveniente mantener esta clase de activos que ofrecen cobertura contra el ajuste del dólar por encima de los precios
Lejos quedaron los pronósticos de consultores de la city que habían afirmado el año pasado que el dólar superaría los 200 pesos. En el mercado aumentó la confianza en que el equipo económico conseguirá controlar la cotización de la divisa. La recuperación a partir de diciembre de la compra de dólares del Banco Central es otra de las señales.
“Durante el último mes, los inversores se estuvieron desprendiendo de los bonos dólar linked. En lo que va de marzo, el T2V1 y TV22 (bonos dólar linked con vencimiento este año y el próximo) acumulan rojos de 4,5 y 7,0 por ciento, respectivamente, y arrojan un rendimiento de 9,1 y 3,6 por ciento”, señaló la agencia de bolsa Portfolio Personal.
La baja en el precio de estos bonos (o su contraparte que es el aumento de la rentabilidad) se explica por la falta de interés de los inversores en estos títulos en un escenario que se percibe con una mayor estabilidad cambiaria.
Las apuestas del mercado apuntan a otros activos en pesos que ajustan, por ejemplo, a través del coeficiente CER.
En el informe de la agencia de bolsa detallaron que “en el mercado de futuros de dólar fue inmediata la respuesta a la dinámica cambiaria actual, en la que se redujo el ritmo de corrección diaria del tipo de cambio".
La curva de tasas implícitas, indicaron, se fue aplanando en las últimas semanas, hasta alcanzar “niveles de entre 33 y 42 por ciento anual, cuando en noviembre y diciembre del año pasado se encontraba en un rango de 50 a 80 por ciento”. Esto significa que las expectativas de devaluación bajaron a menos de la mitad en unos pocos meses.
El dólar mayorista había aumentado hasta el viernes pasado un 1,7 por ciento en los que de este mes, cerrando en 91,4 pesos. La suba de la semana pasada fue de 51 centavos. Se trata de una cifra idéntica respecto de lo que había aumentado la semana anterior.
“En este marco la autoridad monetaria vuelve a ser el protagonista en cada una de las ruedas del mercado de cambios. La semana pasada consiguió más de 300 millones de dólares en compras netas. En lo que va del mes acumula más de 1200 millones. En tanto, se mantiene estable en torno al 59/64 por ciento con el contado con liqui a 149 pesos”, resumió el informe.
Por el lado de las colocaciones de deuda del Tesoro en marzo se espera nuevamente conseguir una buena tasa de refinanciamiento. El Ministerio de Economía publicó este lunes que realizó una nueva licitación de títulos consiguiendo adjudicar 32 mil millones de pesos en letras del tipo Ledes, Lepase y Lecer.
El vencimiento de estos títulos es a 2021 y 2022. En total se recibieron 180 ofertas y el monto ajudicado se repartió con la colocación de 8 mil millones de pesos en las Ledes (letras a descuento), 11 mil millones de pesos en Lepase (tasa variable más cupón de 1,75 por ciento), y por último 13 mil millones de pesos en Lecer (ajustadas por inflación).