La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, dijo estar "consternada" luego de que Turquía anunciara su retiro de un tratado europeo destinado a combatir la violencia de género. Bachelet llamó al gobierno turco a revertir la decisión y "hacer esfuerzos concretos" para proteger a las mujeres. El Convenio de Estambul obliga a los gobiernos a adoptar leyes que castiguen la violencia doméstica y abusos similares, incluida la violación conyugal y la mutilación genital femenina. El gobierno de Recep Tayyip Erdogan argumentó su salida diciendo que el convenio había sido "secuestrado para normalizar la homosexualidad incompatible con los valores sociales y familiares de Turquía".
"La Alta Comisionada ha expresado su consternación por la retirada, que representa un importante paso atrás en los esfuerzos de Turquía por avanzar en los derechos de las mujeres, especialmente porque las desigualdades de género siguen siendo un grave problema en la sociedad turca", señala el comunicado de la oficina de Michelle Bachelet.
La retirada del llamado Convenio de Estambul, un importante tratado regional de derechos humanos sobre la lucha contra todas las formas de violencia contra las mujeres, "refleja preocupaciones más amplias sobre la situación de los derechos humanos en el país, en particular la reducción del espacio cívico y la falta de participación democrática efectiva en la toma de decisiones", agrega la declaración.
La expresidenta chilena entiende que la decisión turca de retirarse del tratado se tomó sin debate parlamentario ni consulta más amplia con miembros de la sociedad civil, incluyendo a colectivos defensores de los derechos de la mujer. La decisión "es aún más chocante", según el comunicado de la ONU, ya que Turquía fue la primera en ratificar dicho tratado en marzo de 2012.
El Convenio sobre prevención y lucha contra la violencia machista fue firmado originalmente en mayo de 2011 en Estambul por catorce países miembros del Consejo de Europa, entre ellos Turquía, cuando Erdogan todavía era primer ministro. Desde entonces entró en vigor en 34 países del Consejo de Europa. Rusia y Azerbaiyán son los únicos países de ese grupo que no han firmado ni ratificado el pacto.
La retirada del tratado "envía una señal negativa al resto del mundo" según Bachelet, en un momento en el que la pandemia de coronavirus ha aumentado aún más la violencia contra las mujeres. El presidente Erdogan firmó el sábado pasado un polémico decreto para retirar al país del Convenio de Estambul, el primer instrumento vinculante en el mundo para prevenir y combatir la violencia de género.
Los sectores conservadores turcos alegan que el tratado perjudica la unidad familiar y fomenta el divorcio. Turquía debatió su posible retirada de este convenio después de que un alto cargo del partido de Erdogan planteara el tema del abandono del tratado el año pasado. Desde entonces, las mujeres se manifestaron masivamente en Estambul y en otras ciudades exigiendo al gobierno que respetara el convenio.