El fiscal federal Federico Delgado apeló hoy el fallo del juez Sebastián Casanello que en la causa en que se investiga al presidente Mauricio Macri por lavado de activos y omisión maliciosa de las empresas familiares radicadas en Bahamas y en Panamá, que aparecieron en la filtración de los Panamá Papers. La decisión de Casanello llegó tras un año de dilaciones y falta de colaboración de la Justicia, de la Cancillería y de Brasil, donde había sospechas de movimientos millonarios de una de las firmas.
Delgado objetó el contenido del fallo en el cual Casanello se declaró incompetente para seguir con el expediente y el giro de la investigación al fuero Penal Económico. El fiscal insistió con que es necesaria la recolección de "información internacional y de completar la local" para determinar si existió o no el delito de lavado por parte del Presidente.
Tras la decisión de Casanello, Macri había festejado su supuesta desvinculación de los Panamá Papers. "Desde el primer día dije que no había ningún delito en lo que se me endilgaba, que no tenía vínculos comerciales con esas sociedades, que no había sido accionista, que no había recibido ningún ingreso de esas sociedades (offshore), con lo cual no tenía que haberlas declarado, por lo que no hubo declaración maliciosa ni lavado de dinero. Me alegro que se haya terminado", celebró el Presidente.
Para el fiscal, la decisión de Casanello de declarase incompetente es “prematura” ya que fue tomada antes de descartar fehacientemente que pudieran existir maniobras de lavado de dinero tal cual se investigaba. Según Delgado la investigación presentó “falencias” y no tuvo un objetivo claro. "Falta completar algunas diligencias que hemos identificado. Es necesario, asimismo, insistir con la dimensión internacional. Recién cuando la información esté disponible, el juez podrá tomar una decisión de acuerdo a la teoría de la elección racional y resolver, en consecuencia", remarcó Delgado.
Delgado recordó que la Corte Suprema de Justicia determinó que para resolver sobre la competencia, el juez debe realizar "una adecuada investigación que permita individualizar los hechos sobre los cuales versa, las circunstancias de modo, tiempo y lugar y las calificaciones", algo en lo que Casanello se quedó a mitad de camino.
La causa se inició en 2016 tras el informe del consorcio internacional de periodistas conocido como Panamá Papers, el cual arrojó la vinculación de Macri con las sociedades offshore Kagemusha y Fleg Trading LTD. Kagemusha fue constituida en Panamá en 1981 y Fleg Trading en 1998 en Islas Bahamas; en esta última Macri figuró por meses como integrante del directorio.
La denuncia apuntaba a la supuesta omisión maliciosa cometida por el Presidente al no haber presentado en su declaración jurada su participación en las sociedades, pero luego se extendió hacia supuestas maniobras de lavado de dinero. "La justicia tiene una magnífica oportunidad: investigar al poder instituido. Esto es decisivo: investigar y no culpar. Investigar", valoró el fiscal en su apelación, en la cual advirtió que "aún no sabemos si quienes detentaban la voluntad social de Fleg Trading y Kagemusha cometieron un ilícito y si Mauricio Macri omitió a propósito consignar en su declaración jurada datos que debió colocar".
Ahora la sala II de la Cámara Federal deberá definir si la causa sigue en poder de Casanello y Delgado o bien pasa a otro fuero.