“En medio del camino de la vida
me vi perdido en una selva oscura”
La Divina Comedia. Dante Alighieri
El ministro del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro anduvo de recorrida por Salta, y probablemente haya tenido una experiencia similar a la del Dante, cuando se vio sumergido en medio del infierno acompañado de Virgilio como guía de los nueve círculos de los pecadores.
Aquí no se metió en el Averno propiamente dicho, pero casi; de guía lo tuvo a Emiliano Estrada y le alcanzaron solamente dos reuniones para encontrar personajes con los que el escritor italiano hubiese llenado en un abrir y cerrar de ojos cada uno de sus círculos.
Luego de cumplir con su rol institucional de ministro, que incluyó la respectiva inauguración con la que se agasaja a casi todo funcionario nacional que pisa estas tierras (más ahora que prácticamente todas esas obras están pagadas por Nación), a de Pedro se lo llevaron a un almuerzo en la residencia de Las Costas.
Allí Gustavo Sáenz más que de anfitrión, hizo de presentador, porque luego de ofrendarle a sus criaturas (diputados, senadores, concejales y funcionarios afines al peronismo/justicialismo), tiró un bomba de humo y desapareció silbando bajito, mientras todos los sorprendidos presentes trataban de deducir si ese acto de magia era en serio, era una joda o se trataba de una teatral forma de ir al baño cinco minutos. Fue en serio, nunca más volvió.
Es que esto de andar haciendo equilibrio para las elecciones provinciales entre el PRO, renovadores, el romerismo, radicales, el PJ y el albertismo, lleva al gobernador a caer en acciones temerarias como por ejemplo dejar la reunión en manos de los compañeros gerentes del PJ, Pablo Outes y Miguel Isa.
El gobernador es afecto a las coaliciones ambidiestras. Bajo su paraguas hace alquimias tan inverosímiles como Marcos Vera y Martín de los Ríos, o el propio Outes y el ex militar negacionista Juan Manuel Pulleiro. De ahí que ese título nobiliario de presidente del PJ que reciben los gobernadores salteños cuando asumen, lo incomode un toque y por ahora prefiera esquivarlo, especialmente pensando en el “que dirán” sus compañeros de aventura electoral propensos a desayunar con bananas.
Por eso, en vez de desembarcar en cuerpo y alma en la sede de Zuviría al 900, prefirió poner a cargo del asunto a sus dos hermanos de la vida, el discreto y confiable Loro y el extrovertido y un toque peligroso Turco, inclusive a riesgo de que no cuaje una tranquila convivencia entre ambos.
Así como Sáenz supo construir una relación fraternal con el actual presidente del PJ salteño, al extremo de mimetizarse en más de un karaoke cantando canciones de Pimpinela, espera que Outes llegue a ese mismo nivel de confianza con Isa.
Sin embargo, los rumores indican que la relación entre ambos compañeros gerentes en vez de parecerse a la de los hermanos Galán, tiene más similitudes con la de Caín y Abel, sin estar del todo claro quién sería quien.
Lo cierto es que Sáenz confía ciegamente en ambos, aunque también es consciente de los riesgos de dejarle la llave de Las Costas a Isa para que cierre después de la reunión. Porque el revitalizado ex intendente sutilmente primero se queda a dormir, al día siguiente cuelga en el living un cuadro de Perón, después ya pone el cepillo de dientes en el baño y al cuarto día lo manda al gobernador a dormir al cuarto de huéspedes. Solamente un iluso piensa que un carnívoro se alimenta con ensaladas... o con candidaturas a concejal. Instinto que le dicen.
Pero volviendo a la reunión con de Pedro, el objetivo del peronismo oficialista fue mostrarle la cantidad que son, el despliegue territorial que tienen y, sobre todo, el absoluto reconocimiento del liderazgo de Sáenz. Y como para que nadie arruine la estrategia, durante el encuentro solo hubo tres oradores y la interacción permitida a la tropa con el ministro, se limitó a un intercambio de saludos y pedidos de selfies.
Todo lo contrario fue la reunión que Wado tuvo por la tarde con los numerosos referentes del Frente de Todos. Pasó del verticalismo saencista a esa especie de cooperativismo de centro de estudiantes que tiene el FdT salteño, en la que puede pedir la palabra, y seguramente se la dan, uno con muchos votos, otro que no arrastra ni a los parientes, uno más de la primera hora y cierra el que llegó hace 15 minutos. Lo cual no está mal, esa pluralidad es la base de la democracia
El problema es que muchas veces esa dinámica se convierte en catarsis o una sucesión de quejas "por lo injusta que es la política y lo malo (de maldad) que es oficialismo". Lo cual no está mal, los problemas se resuelven exteriorizándolos y charlando.
Pero nuevamente el problema es que muchas veces todo eso deriva en pasadas de facturas, reproches y trapitos al sol. Lo cual no está mal si fuese puertas adentro, pero así como recomiendan a las parejas no discutir delante de los hijos, tampoco se recomienda a los referentes políticos hacerlo delante de un ministro, porque puede que se lleve una impresión fea.
Algo así pasó en el encuentro con el FdT, aunque si bien no fue escandalosa, estuvo más cerca de parecerse a una terapia grupal que a un mitin político. Sin embargo de Pedro, cuando le tocó el turno, les dejó tarea para la casa mediante un ejercicio de lógica: Alberto es el líder del FdT, Alberto preside el PJ, El PJ es del FdT.
Ahora será cuestión de los salteños ver como encajan al justicialismo en el Frente o al Frente en el justicialismo. Se aceptan ideas y sugerencias. No necesariamente tienen que terminar siendo grandes amigos, pero sí por lo menos conviviendo civilizadamente dentro de un espacio que se referencia con el presidente.
Horóscopos eran lo de antes
Y en estos tiempos de incertidumbre, con un futuro condicionado a la llegada de la famosa segunda ola de Covid, encontrar alguna certeza es cuanto menos una epopeya. De ahí que haya sorprendido la contundencia de Matías Posadas para afirmar con seguridad que las elecciones se harán sí o sí el 4 de julio y sanseacabó.
“La actividad propia del día de la elección se puede hacer con total normalidad, es muy similar a ir a un banco o a un shopping”, reafirmó el secretario de la gobernación y, para variar, posible candidato a algo. El tema es que si llega la segunda ola es altamente probable que tampoco se pueda ir a un banco o a un shopping, pero bueno, que esos detalles no empañen una flor de afirmación.
Como habrá sido de contundente la predicción, que el jujeño Gerardo Morales, que también tiene un Posadas en el staff de ministros, adelantó las elecciones para junio. En tanto Nación, que hace malabares, calcula días y reduce dosis para que rindan más las vacunas, mira como los dos gobernadores norteños se mandan con el desdoblamiento a contrapelo de las recomendaciones sanitarias.
Igual mientras el gobierno nacional pide que no se desdoblen las elecciones para no incrementar el riesgo sanitario, sostiene las PASO para agosto. A su vez las provincias que adelantan y duplican las elecciones, cada vez que pueden piden que se suspendan las PASO. Esta múltiple paradoja se zanjaría con la Nación, vía Congreso, sacando por este año a las Primarias y a cambio los gobernadores se pegarían lo más que puedan al calendario nacional, que tendría la elección en octubre. Esta versión viene cobrando fuerza en los últimos días y de cumplirse tiraría abajo la profecía del mentor de Matías Assenato.
Igualmente con o sin pandemia, la campaña electoral de este 2021 será la más particular de la historia reciente, debido a la poca posibilidad que tendrán los candidatos de ir a los barrios a pedir el voto cara a cara.
En ese contexto, los medios audiovisuales adquieren una relevancia fundamental, y nuevamente pinta que Canal 11 podría volver a revalidar el título de partido político más exitoso del último lustro. Por eso es probable que a los candidatos más votados habría que buscarlos actualmente en una pantalla de TV, y no tanto en una sede partidaria o centro vecinal.
Populismo y pragmatismo
“A menudo los hijos se nos parecen...”, canta Joan Manuel Serrat y a Juan Carlos Romero se le pianta un lagrimón. En estos últimos días el senador arremetió vía redes sociales contra Estela de Carlotto y Cristina Kirchner. Además sacó de la galera el concepto de Peronismo Republicano, al que presenta como una salida no populista para los simpatizantes del General.
En paralelo, su hija, la intendenta de Salta, Bettina Romero, recibe y se saca foto con cuanto enviado del gobierno nacional llega a estas tierras. Reconoce al presidente por los fondos que recibe y mantiene una excelente relación con los dos salteños funcionarios: Estrada y Gonzalo Quilodrán.
Además cerró unas paritarias complicadas en solo tres reuniones y con un porcentaje que entre aumento y bonos dejó conforme a los gremios municipales con los que no tiene una muy buena relación.
Se sospecha que entre la primera floja reunión de la semana pasada, y el cierre de las paritarias del viernes, la municipalidad mientras arreglaba un bache dio con el tesoro enterrado de los Incas. Porque pasó de ofrecerle un porcentaje ínfimo en comparación a lo que pedían, a acordar prácticamente lo mismo que dio el gobierno provincial, que como se sabe maneja una billetera más abultada.
Finalmente Bettina cerró marzo entregando el predio de la calle Catamarca a Juventud Antoniana, de esta manera pudo cantar bingo con las camisetas, porque en este mes la intendenta se puso la de Gimnasia y Tiro por el ascenso, la de Central Norte por el cumpleaños y remató con la de Juventud por lo antes comentado. Vo’ querías populismo? Ahí tene’.
Ahora, cómo lo habrá tomado Juan Carlos Romero es una incógnita, porque repasando la agenda de su hija, esta parece representar todo lo que el senador no es. Aunque si después se hila un poquito más fino, Bettina parece estar aplicando un pragmatismo para gobernar la ciudad, tal como supo ostentar su padre en los 12 años como gobernador. “...Así nos dan la primera satisfacción”, remata Serrat .