Convocada por la intendencia de Seclantás, el viernes último se llevó a cabo en esa localidad una reunión de referentes comunidades originarias con autoridades municipales y representantes de la Unión Europea y del programa Lugares Mágicos. El encuentro fue para conversar sobre el Proyecto Alto Valle y se constituyó en la primera instancia formal en que los habitantes indígensa de esa zona del Alto Valle Calchaquí son expresamente informados sobre esta iniciativa.
En la reunión se presentaron dos proyectos de ordenanzas acercados por la Fundación Runas y la Fundación Grupo del Abra, que ejecutan el Proyecto Alto Valle.
Norberto López, presidente de la Comunidad Diaguita de Patapampa y del Concejo Deliberante municipal explicó que aún “no se entiende muy bien” cómo ensamblan la propuesta de las fundaciones con las comunidades originarias. A su entender, los dos proyectos de ordenanzas “tienen palabras muy técnicas”. Llevarlas al interior de cada comunidad demandará tiempo. “No vamos a sacarla en un mes”, adelantó a Salta/12 el referente originario y del PJ.
El Proyecto Alto Valle que financia la Unión Europea busca crear una microrregión al integrar las comunas de Molinos, Seclantás, Cachi, Payogasta y La Poma, todas en el norte calchaquí. Los proyectos de ordenanzas municipales propuestos por las fundaciones Runas y Grupo El Abra pretenden introducir regulaciones comunes en torno a espacios a preservar, la conservación del entorno patrimonial y la expansión urbana de las principales cabeceras municipales.
Vigente desde fines de 2017, cuando la UE aprobó el desembolso de casi 800 mil euros, son dos los requerimientos claves solicitados por el organismo. Pretenden alcanzar la gobernanza ambiental a través de normativas que aprueben las comunas y la provincia de Salta. En el primer caso, se trata de ordenanzas y en el segundo, una ley marco para la microrregión. Sin embargo, aunque la UE informó a Salta/12 que las comunidades diaguitas calchaquíes fueron consultadas, la realidad indica que hay comunas que prefieren afrontar por cuenta propia las formalidades del paso obligatorio de la consulta libre, previa e informada.
“Nos juntamos y charlamos sobre el proyecto y las ordenanzas. Planteamos nuestras diferencias y las incompatibilidades que observamos con respecto al marco normativo vigente en el municipio”, comentó a Salta/12 el intendente Mauricio Abán.
El jefe comunal aclaró que su gestión siempre estuvo abierta al diálogo con todas las comunidades. “Consultamos todo el tiempo a comunidades como La Sala, Alumbre y Condorhuasi, Cabrería, Patapampa. Mantenemos un diálogo constructivo”, dijo aunque no ocultó su malestar ante opiniones que visibilizaron otras comunidades de la comuna, como el caso de La Laguna. En lo profundo, el malestar refiere a diferencias que siempre existeron. Norberto López las describió como un proceso que emerge de la convivencia de comunidades más fortalecidas que otras.
Solo en Seclantás hay nueve comunidades con personería jurídica, la mayoría en el Valle de Luracatao. En la reunión, participaron representantes de las comunidades de Patapampa, Cuchiyaco, Cabrería, La Puerta, y Alumbre / Condorhuasi. Los representantes por La Laguna, Refugio, La Sala y El Duraznal no pudieron asistir por tener a familiares a cargo o por las dificultades propias del traslado. Hay que tener en cuenta que los Valles Calchaquíes son un conjunto de quebradas. Seclantás y Luracatao son valles separados por altos cordones cordilleranos. Los parajes se conectan por caminos de montaña, muchas veces de difìcil acceso.
López destacó dos temas cruciales tratados durante la reunión: la patrimonialización y los recursos naturales. “Nosotros tenemos muchas dudas al respecto”, comentó. Sus preguntas profundizan el para qué y para quién la Unión Europea propone un proceso de patrominialización. “En Luracatao, por ejemplo, no nos queda claro cómo será el pastoreo y la recolección de leña en sectores que se consideren patrimonio en el futuro”.
Sin embargo, López destacó que en la reunión, con Liliana Guitián por la Fundación Runas, Isolina Correa por la Fundación Grupo El Abra y Silvia Fajre por la consultora Fajre&Asociados, acordaron en enviar las propuestas que las comunidades presenten para tratarlas en un próximo encuentro. “Hay artículos que no nos sirven”, dijo. “Las ordenanzas no tienen por qué ser comunes para todas las regiones del valle”.
Fernanda Funes, secretaria de Turismo de Seclantás, contó a Salta/12 que en el encuentro todos los participantes plantearon sus dudas respecto a las ordenanzas en particular y al Plan Alto Valle en general. “Vamos a seguir revisando este tema con el Concejo Deliberante hasta alcanzar la modifcación de las propuestas de ordenanzas”, sostuvo, y explicó que la gestión pretende plasmar una propuesta de ordenanza representativa de todas las opiniones de la comunidad. “Es lo que busca el municipio”.
Es importante recordar que unos meses antes del desembolso de la UE a las dos fundaciones, el organismo adoptó las recomendaciones de su Consejo de Asuntos Exteriores. Se trata del informe “Conclusiones del Consejo sobre los pueblos indígenas”. El documento tiene cuatro páginas y ocho puntos. Justamente en el octavo, subraya lo “crucial de reforzar aún más las oportunidades de diálogo y consulta con los pueblos indígenas en todos los niveles de cooperación de la UE”. Hace particular hincapié “en los programas y proyectos financiados por la UE en todas las modalidades de ayuda, para garantizar su plena participación y su consentimiento libre, previo e informado de manera útil y sistemática”.
Hasta el momento, las fundaciones que llevan adelante la iniciativa intentaron que los proyectos de ordenanzas fueran tratados en los Concejos Deliberantes comunales pero sin considerar las formalidades expresadas por el Convenio 169 de la OIT, que establece la obligatoriedad de sus estados partes de realizar la consulta previa, libre e informada a los pueblos originarios cuando se afronten acciones que puedan afectar su forma de vida. Argentina lo ratificó por ley en 1992. El municipio Seclantás redobló su apuesta participativa. “No soy una persona que cierra las puertas”, dijo su intendente Mauricio Abán.