Con el arranque de los debates de fondo entró en una fase decisiva el juicio contra el policía blanco acusado del asesinato de George Floyd, un caso que generó masivas manifestaciones contra el racismo y reabrió el debate sobre la justicia en Estados Unidos. Luego de tres semanas dedicadas a la selección de los jurados, la acusación debe presentar su caso contra Derek Chauvin, el agente juzgado por asesinato y homicidio involuntario. El juicio estuvo marcado este lunes por la transmisión ante el jurado del escalofriante video de la muerte de Floyd, que enmudeció a los asistentes y será el instrumento principal de la acusación durante el proceso.
Debido a la pandemia el juicio se lleva a cabo sin público, pero las audiencias se transmiten en vivo y muchos estadounidenses las siguen de cerca. Se espera el veredicto para fines de abril o principios de mayo. Los fiscales intentarán demostrar que Chauvin, que comparece libre, mostró desprecio por la vida de Floyd al mantener la maniobra de asfixia a pesar de que el afroestadounidense había dicho veinte veces "No puedo respirar" y luego se desmayó. Eric Nelson, el abogado de Chauvin, buscará probar en cambio que el oficial de policía, que se declara inocente, siguió los procedimientos autorizados para controlar a un sospechoso.
"Hoy comienza un juicio histórico que será un referéndum sobre lo lejos que ha llegado Estados Unidos en su búsqueda de igualdad y justicia para todos", afirmó Ben Crump, abogado de la familia Floyd, antes de los alegatos de apertura. "El mundo entero esta mirando", agregó antes de arrodillarse junto a los familiares de la víctima durante ocho minutos y 46 segundos, el tiempo que Chauvin permaneció con su rodilla sobre el cuello de George Floyd el 25 de mayo en Minneapolis.
Apenas iniciado el juicio uno de los fiscales, Jerry Blackwell, se dirigió a los 12 miembros del jurado y anunció que su objetivo era demostrar que el ahora exagente Chauvin es "de todo menos inocente" y que debe ser condenado por el asesinato de Floyd. Con ese fin exhibió uno de los videos que registraron la muerte de Floyd, grabado por un testigo de los hechos.
En las imágenes se lo podía ver a Floyd tendido en el suelo y esposado, mientras gritaba de dolor, llamaba a su madre y repetía una y otra vez: "¡No puedo respirar!" y "No puedo más". También se apreciaba cómo Chauvin apretaba su rodilla contra el cuello de Floyd y permanecía indiferente ante los gritos de los transeúntes que lo increpaban, le pedían que soltara a la víctima y que comprobara si seguía teniendo pulso.
Chauvin hizo caso omiso a los pedidos y permaneció con la rodilla en el cuello de Floyd hasta que llegó una ambulancia, momento en el que el hombre negro ya estaba inconsciente. Mientras el video se mostró en la pantalla, la sala permaneció en absoluto silencio.
Chauvin, sentado junto a su abogado, alzó su cabeza en varias ocasiones para mirar la grabación y volvió a bajarla para mantener la vista fija en un cuaderno amarillo en el que fue tomando notas. El expolicía, que fue despedido de la fuerza por el caso, acudió a la corte vestido con un traje gris, camisa y corbata azules y una mascarilla celeste.
Luego de observar el impactante video, Blackwell dejó claro que la meta de la acusación es que el jurado tome una decisión basada en las imágenes y no en los argumentos que pueda presentar la defensa. "Pueden creer lo que están viendo sus ojos. Esto es homicidio, esto es asesinato", remarcó.
"El 25 de mayo de 2020, el señor Chauvin traicionó su placa policial cuando usó una fuerza excesiva e irracional sobre el cuerpo del señor George Floyd", dijo Blackwell. "Le puso las rodillas en el cuello y en la espalda, machacándolo y aplastándolo, hasta que el aliento -no, señoras y señores, hasta que la propia vida- le fue arrancada", continuó.
Por su parte el abogado de la defensa, Eric Nelson, intentó desviar la atención del jurado y profundizó en los detalles específicos del caso, como el estado en que se encontraba Floyd que, según dijo, estaba ebrio y actuó con hostilidad hacia la policía. "No hay en esta corte una causa política o social", afirmó Nelson, intentando desvincular el caso de Floyd del debate en Estados Unidos sobre la violencia policial contra los negros.
Chauvin y otros agentes iban a detener a Floyd después de que éste intentara usar un billete falso de 20 dólares en un supermercado. El expolicía está acusado de asesinato en segundo grado, penado con hasta 40 años de cárcel; asesinato en tercer grado, con una condena máxima de 25 años; y homicidio en segundo grado, que acarrea hasta 10 años de privación de libertad.
Sin embargo, como no tiene antecedentes penales, Chauvin solo podría ser condenado a un máximo de 12 años y medio de prisión por los primeros dos cargos y a cuatro años de cárcel por el tercero. Debido al coronavirus los otros tres policías involucrados en la tragedia, Alexander Kueng, Thomas Lane y Tou Thao, serán juzgados en agosto por "complicidad en asesinato".
El Ayuntamiento de Minneapolis acordó a mediados de marzo pagar 27 millones de dólares por daños y perjuicios a la familia de Floyd para poner fin a su denuncia civil. "Tengo un gran vacío en mi corazón que no se puede llenar con ninguna cantidad de dinero. Queremos una condena", dijo el domingo Philonise, hermano de George Floyd. La defensa del joven afroamericano también criticó el acuerdo, argumentando que podría influir en los miembros del jurado.