El estado de San Pablo, el más poblado y desarrollado de Brasil, registró 1.209 muertes por coronavirus en las últimas 24 horas, la marca más alta para un día en lo que va de pandemia y en medio de fuertes medidas de distanciamiento social.
El dato es de la Secretaría de Salud de San Pablo, un estado con 42 millones de habitantes y que llega así a un total de 73.462 fallecidos por la covid-19.
En todo Brasil se han comprobado hasta ahora 313.866 decesos por covid-19, con 12,6 millones de contagios, según datos del Ministerio de Salud difundidos este lunes, en momentos en que el país vive una aceleración de la pandemia, atribuida en parte a la circulación de nuevas y agresivas mutaciones.
En San Pablo, donde el 26 de febrero del año pasado se registró el que fue el primer caso de Brasil y que es la región más afectada del país, las autoridades han adoptado diversas medidas para contener los contagios, sobre todo frente a la inminencia de la Semana Santa.
Desde el pasado viernes, en la capital homónima y en muchas de las ciudades del Estado se ha prohibido el funcionamiento de las actividades consideradas no esenciales y rige un toque de queda nocturno, medidas no siempre respetadas por toda la sociedad.
El aumento de la curva pandémica ha provocado, además, un colapso de la red hospitalaria del país, que tiene una especial incidencia en San Pablo.
Según la Secretaría de Salud, al menos 25 hospitales públicos de ese Estado no tenían disponible ni siquiera una cama de cuidados intensivos, una situación similar a la que sufren muchas de las ciudades del país desde hace al menos dos semanas.