Con un nuevo aire tras la salida de su libro Primer tiempo, Mauricio Macri comenzó a trabajar para complicar la estrategia electoral de Horacio Rodríguez Larreta en la provincia de Buenos Aires. El ex presidente tuvo un encuentro con los intendentes PRO que conforman el Grupo Dorrego, que le plantearon que la estrategia bonaerense debe ser resuelta entre sus dirigentes y no van a aceptar nadie que llegue impuesto desde la Ciudad de Buenos Aires. Macri se mostró de acuerdo. El encuentro es una mala noticia para la estrategia del jefe del gobierno porteño, que evalúa posicionar como candidato a gobernador a Diego Santilli, su vice. A su vez, la reunión les sirvió a los dos Macri: a Mauricio para mostrarse como una figura todavía con peso en su espacio político y a Jorge, el intendente de Vicente López, que busca frenar el eventual desembarco del vicejefe porteño y ser él el candidato a gobernador.
El cónclave fue en el Centro Asturiano de Olivos. Además de los Macri, estuvieron los intendentes de Lanús, Néstor Grindetti; de Tres de Febrero, Diego Valenzuela; el de La Plata, Julio Garro; el de General Pueyrredón, Guillermo Montenegro, entre otros. La reunión llegó tras la presentación del libro del ex presidente y con un incremento notable de su perfil público en los últimos días.
Según el comunicado oficial, se encontraron para "compartir con él las lineas de trabajo y construcción política del proyecto que tienen de y para la Provincia de Buenos Aires". Traducción: los intendentes plantearon allí lo que vienen planteando desde que se formó el Grupo Dorrego, que agrupa a los mandatarios PRO, es decir, que la alternativa de la alianza en la provincia de Buenos Aires debe surgir de sus dirigentes y no ser impuesta desde arriba (ni desde CABA). Quizás obviaron la parte de mencionar a Marcos Peña como el que ejecutaba en otros tiempos esa imposición, habida cuenta de que su interlocutor era el ex presidente.
Sigue el comunicado que difundieron tras el encuentro: "Compartieron la relevancia de generar una alternativa para ganar en las elecciones legislativas de este año y que el resultado de esa elección sea el sostén de una realidad distinta y mejor para el 2023".
El ex mandatario --informaron-- se mostró a favor de "consolidar un proyecto provincial, sostenido en intendentes que conocen la provincia, gestionan el día a día, y que además lograron ganar en sus distritos y hoy gobiernan para más de 4 millones de bonaerenses". Según quienes estuvieron en el encuentro, el ex mandatario se mostró a favor de la política de no aceptar intromisiones internas al PRO bonaerense. Esta es una buena noticia para el grupo de intendentes y, en especial, para el de Vicente López, Jorge Macri, quien carretea para ser candidato a gobernador en 2023 y planea la presentación de su propio libro en algunas semanas.
Para Mauricio Macri, el encuentro sirve para mostrar que sigue teniendo peso en el espacio. En el PRO bonaerense comentaban que la foto del ex presidente rodeado de los intendentes parece de otra época. No obstante, ocurrió a más de un año de su salida del gobierno.
"Coincidieron en la importancia de haber sostenido la unidad pese a la derrota, y que ese logro tiene mucho que ver con las intendencias en las que se ganó --concluye el comunicado oficial--. El desafío ahora es la amplitud y el crecimiento fomentando la competencia." Y remarca que se mostraron de acuerdo en "mantener la coherencia entre los discursos y las acciones llevadas a cabo y en ese sentido se mostraron preocupados por el ritmo lento de la vacunación y por el aumento de casos de covid-19 en la Provincia de Buenos Aires".
"Los intendentes del Grupo Dorrego seguimos trabajando en conjunto para construir y consolidar un proyecto superador para los bonaerenses que surja desde la Provincia de Buenos Aires. Hoy nos juntamos con Mauricio para intercambiar miradas sobre la evolución de la pandemia, la inseguridad en el conurbano, la actualidad nacional y provincial, y los enormes desafíos que nuestro espacio tiene por delante este año", dijo Jorge Macri tras el encuentro.
La clave de la reunión, no obstante, está en el proyecto de importar a Santilli como candidato a gobernador de 2023. Es una de las hipótesis en evaluación por parte del jefe de gobierno porteño y viene siendo resistida desde el año pasado por Jorge Macri. Ahora, su primo le dio una mano al intendente de Vicente López. "Es muy buena la sintonía de Jorge con Patricia Bullrich y Mauricio para el armado en la provincia de Buenos Aires y, sobre todo, para evitar imposiciones desde la Ciudad de Buenos Aires", reconocían en el grupo de intendentes.
Dicho de otra manera, la primera batalla silenciosa entre Macri y Larreta por el control final del PRO se dará por el territorio bonaerense. No es casual que, de la política verticalista que planteó siempre de la mano de Peña, ahora el ex presidente se muestre de acuerdo con el planteo de que los intendentes deben mandar en el armado de las listas de este año. Cambia, todo cambia.